8-Confluir 

Angeli Furió Dúo. Independiente

El puro sonido de las guitarras es la estrella absoluta de este disco que las pone en primer plano, a través de la técnica y la sensibilidad de sus intépretes, Leandro Angeli y Pedro Furió. Acá no se inventa nada: se vuelve a lo simple (que, como se sabe, es lo más complejo), a los ritmos y autores clásicos (Leguizamón, Falú, Yupanqui, Hilda Herrera, también Gismonti o Rudi Flores), y además se presentan de temas propios. Invitados como Laura Albarracín, Lilián Saba o Matías Furió enriquecen la propuesta. Es un bello Confluir de guitarras y de artistas. K. M.


8-La canción quiere

Betiana Charny. Independiente

La santafecina Betiana Charny es una de las numerosas cantantes que avanzan en la música argentina actual. Logra un estilo que la distingue por los rasgos particulares de su voz y su interpretación, afinada y expresiva. Y además se anima a un repertorio de compositores contemporáneos de distintas provincias, con bellas nuevas canciones (a excepción del tema de Zitarrosa que da nombre al disco). Entre los logros musicales del disco, bien sustentado por Candelaria Quiñones, Jorge Bisso y Manuel Navarro, se destaca la versión de “Chapelines asesinos”, del tucumano Topo Encinar. K. M.


Nos vamos a morir de hacer estrategias...

Los Rusos Hijos de Puta / Sony Music

Si el temor era que Los Rusos se “pasteurizaran” en su debut para una multinacional, ya puede ser archivado: la banda que agita hace tiempo la escena indie exhibe las virtudes conocidas e incluso agrega el poderío de una producción en la que lo hi–fi no lima sus asperezas de base. Desde “Soy horrible” al cierre de “Perdido en el DF”, Luludot Viento, Santiago Mazzanti, Florencia Mazzanti y Julián Desbats conmueven, patean, infectan los parlantes de climas ahumados, energizan. Es decir: siguen siendo Los Rusos Hijos de Puta. Y se agradece. E. F.