La venta de bienes de consumo masivo cayó 2 por ciento medida en volumen en junio en forma interanual, con lo cual el actual nivel de compras se igualó con los períodos más bajos de 2017, según un informe de la consultora Kantar Worldpanel. Si bien el segundo trimestre cerró estable, en función de la reducción de las ventas en junio y el panorama de debilidad del ingreso real se pronostica una caída del consumo en el segundo semestre. “Luego de la devaluación y la suba de la inflación, cayó el consumo en los hogares de menores ingresos por primera vez en el último año y medio. Perdimos muy rápido lo recuperado a fines del año pasado y veremos una caída relevante en la segunda parte de 2018”, dijo el director de Kantar, Federico Filipponi.
La entidad Consumidores Libres informó ayer, a su vez, que los 38 artículos de la “canasta básica de alimentos” tuvo un aumento del 3,84 por ciento en julio y que desde enero el alza acumulada es del 18 por ciento. Resaltó la suba del 9,1 por ciento del aceite Cocinero de 1,5 litro, el incremento del 7,5 por ciento del filet de merluza y del 6,6 por ciento en el pollo. La harina avanzó un 6,4 por ciento y la yerba, un 5 por ciento. El relevamiento se realiza en forma mensual en los supermercados Coto, Plaza Vea y en centros de abastecimiento de los barrios de La Boca, Caballito, Liniers y Pompeya.
Por último, el índice de precios de supermercados (IPS-CESO) para la cuarta semana de julio fue del 0,7 por ciento en relación a la semana anterior y del 3,8 por ciento en el promedio respecto al mes pasado. La canasta básica alimentaria de julio totalizó 2985 pesos para un adulto equivalente y 9223 pesos para una familia compuesta por cuatro integrantes.
