El senador Miguel Ángel Pichetto cumplió ayer su deseo de lanzarse como precandidato presidencial del peronismo federal con un acto en La Plata, donde criticó al presidente Mauricio Macri pero también a su antecesora, Cristina Kirchner, al considerar que “ambos han fracasado, y además se necesitan y se complementan”. “Tengo la voluntad y convicción de ser alternativa, ser candidato y discutir con inteligencia cómo resolvemos la mejor candidatura de cara a 2019 para volver a ser poder en la Argentina”, expresó el jefe del Bloque Justicialista del Senado en el acto realizado en el Teatro Metro de La Plata.

En esa discusión del peronismo para 2019, Pichetto incluyó al ex ministro de Economía Roberto Lavagna y a los gobernadores de Salta, Juan Manuel Urtubey, y de Córdoba, Juan Schiaretti, a quienes elogió y convocó para llevar adelante la “renovación general del peronismo”. “Esta construcción se diferencia de la construcción política de Unidad Ciudadana”, sentenció el rionegrino y agregó: “Nuestra propuesta no tiene nada que ver con alianzas o inserción de sectores de la izquierda argentina, ligados al viejo PC, aliados de la dictadura militar, o sectores del trotskismo que piensan que rompiendo todo existe la posibilidad de volver al poder”.

Reiteró su idea de ubicar en el “centro nacional” al peronismo que busca conducir. “Si el peronismo no se reconstruye, no instaura liderazgos firmes y no lleva una propuesta, corre el riesgo de diluirse”, advirtió. También indicó que “los últimos cuatro años de gestión de la ex presidenta y del ministro (de Economía Axel) Kicillof fueron un fracaso”, porque “terminaron con un fuerte intervencionismo del Estado, un cepo a la economía, un montón de trabas que hacían imposible que la Argentina creciera”.

En su plan de repartir para los dos lados, inmediatamente después le apuntó a la administración de Macri y señaló que “aumentó el endeudamiento externo, las paritarias siempre a la baja, pérdida de poder adquisitivo tremenda, devaluación del 40 por ciento con paritarias en el sector público del 15 por ciento y una profunda crisis ligada a la pérdida del consumo”. “Ambas han fracasado. Además son funcionales, ambos se necesitan y se complementan y la brecha la alimentan todos los días”, disparó el líder de los senadores justicialistas, aunque aclaró: “Nosotros no somos la avenida del medio”, para marcar diferencias con Sergio Massa, aunque su mensaje sonó bastante parecido.

En este sentido, el rionegrino agregó: “No somos una alternativa híbrida sin rumbo y sin corazón. Nosotros somos el futuro, el proyecto político nacional para recuperar la Argentina, salir de la lógica del ajuste, incrementar la demanda interna, el consumo y una política proactiva de creación de empleo”. Según afirmó, en esa visión económica trabaja junto al ex ministro de Economía Miguel Peirano y al diputado Marco Lavagna, los dos, justamente, integrantes del Frente Renovador.