El presidente de Brasil, Michel Temer, recibió ayer a la jefa de la misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA), la ex mandataria costarricense Laura Chinchilla, que realiza una visita preliminar al país para preparar el despliegue en los comicios del 7 de octubre. Dichas elecciones en Brasil son las primeras en las que habrá un misión electoral de la OEA. La ex presidenta de Costa Rica llegó el martes a Brasil al frente de una representación de la misión en medio de una grave crisis institucional y política que gira, sobre todo, en torno a la candidatura de Luiz Inácio Lula da Silva, quien se mantiene desde la cárcel como indiscutido favorito. El Tribunal Superior Electoral debe pronunciarse en los próximos días sobre su candidatura y se espera que lo excluya. El Comité de Derechos Humanos de la ONU pidió hace unos días a Brasil que garantice la postulación del líder del PT, pese a estar cumpliendo una condena por corrupción. Además de con Temer, Chinchilla se reunirá con el ministro de Exteriores, Aloysio Nunes Ferreira, con quien firmará el acuerdo sobre privilegios e inmunidades de los observadores de la OEA.