El gobernador de Mendoza, Francisco Cornejo, recurrió a las fuerzas de seguridad para evitar que organizaciones sociales y religiosas plantaran un olivo bendecido por el Papa Francisco, al finalizar una peregrinación de más de 2 mil personas en defensa del agua y contra el fracking, una técnica no convencional para aumentar la extracción de gas y petróleo, que busca implementar el mandatario radical en la provincia. 

La situación fue denunciada por la organización La Alameda, que participó de la marcha en repudio al decreto de Cornejo, que permite el sistema de extracción no convencional de petróleo y gas llamado fracking (perforación a tres mil metros de profundidad con agua a presión mezclada con cientos de químicos). 

“Tras más de 300 kilómetros de recorridas por diversos pueblos, la policía no permitió plantar el olivo”, denunció la ONG que lidera Gustavo Vera. Más de 2 mil personas, según estimaron los organizadores, se concentraron el sábado, en la rotonda del núcleo vial de la ciudad de Mendoza, muchos de ellos parte de las asambleas del agua y otros tantos ciudadanos que concurrieron por su cuenta y se sumaron al peregrinaje en defensa del agua.

La iniciativa fue organizada por el científico Esteban Servat, que junto con asociaciones mendocinas, la Fundación La Alameda y el gremio de Camioneros rechazan el fracking.

“La defensa de la casa común y del agua es muy sensible para los mendocinos que entienden que sin agua no se puede vivir”, remarcó Vera, luego del impedimento policial para plantar el olivo bendecido por el Papa. La peregrinación tuvo entre sus filas a representantes de ciudades como Uspallata, San Carlos, San Rafael, Bowen, General Alvear, Las Heras, Zona Oeste, Potrerillos, Las Heras y Tupungato.

También participaron pastores evangélicos que se sumaron desde la localidad de General Alvear, religiosos con inserción en pueblos indígenas, un referente religioso musulmán y otros sacerdotes que a lo largo del camino bendijeron el olivo papal.