El camerunés Christian Mayo (19 años), que se entrenaba con la Reserva de Boca y era una de las promesas de la divisiones inferiores del club, dejó la práctica del fútbol de manera profesional debido a que le detectaron problemas cardíacos en unos estudios de rutina. El mediocampista central ya tenía contrato profesional y había concentrado en algunas ocasiones con el plantel de primera división, aunque no le tocó ingresar de manera oficial.