Central no pudo en la final de la Copa Libertadores de fútbol playa, y fue vapuleado 8-1 por el campeón Vasco da Gama, quien lo derrotó de manera contundente en la ciudad brasileña de Santos. El conjunto rosarino fue ampliamente superado por su adversario, que ya al término del segundo parcial (se divide en tres períodos) se imponía 6-0.