Un doble escrache vivió ayer la ministra de Seguridad Patricia Bullrich al finalizar su visita a Bariloche. Durante la conferencia de prensa tuvo que hablar en medio de los carteles que decían “acá falta Télam”, alusivos al despido de 357 trabajadores en la agencia oficial de noticias. Al rato, un grupo de personas convocados por organizaciones sociales de la zona la escrachó en el Escuadrón de Gendarmería 34 de esa ciudad, a catorce meses de la desaparición de Santiago Maldonado y diez del asesinato del joven mapuche Rafael Nahuel en Villa Mascardi.

“A donde vaya será escrachada, es importante que sepa que también le va a pasar en ciudades chicas”, dijo a PáginaI12 una de las militantes sociales que participó de la protesta en contra de la jefa de las fuerzas de seguridad acusadas por sendos crímenes de Estado. La funcionaria había acudido a Parques Nacionales para hacer un reconocimiento y una capacitación en catástrofes. El año pasado, esa entidad fue la que solicitó el desalojo de la comunidad Lafken Winkul Mapu en Mascardi, que derivó en el procedimiento posterior de la Prefectura donde Nahuel fue muerto por la espalda por una bala de plomo que disparó el cabo Javier Pintos. En esa causa, Pintos fue indagado y está libre, mientras que los compañeros que bajaron el cuerpo moribundo de Rafita tienen prisión preventiva.

Al grito “ole olee, ole olaa, como a los nazis te va a pasar, a donde vayas te iremos a buscar”, la multitud rodeo el Escuadrón 34 de Gendarmería, portando carteles con el rostro de Maldonado y de Nahuel. Maria Nahuel, la tía de Rafita, estuvo en primera fila pegada al enrejado con la foto de su sobrino y no paró de gritarle a la ministra de Cambiemos “asesina, maldita, no te tenemos miedo, van a matar a uno pero seguiremos luchando, soy mapuche maldita, él era un weichafe (guerrero) y lo mataste de un tiro en la espalda, donde estás, da la cara”, según el video que publicó el portal En Estos Días. Pero la ministra ya se había retirado. 

Fabián Tumino, de Multisectorial contra la Represión en Bariloche, dijo a este diario que al enterarse que Bullrich viajaba se pusieron de acuerdo para repudiarla por todos los hechos que la involucran, porque “si no hay justicia que haya escrache”. En principio iba a estar solo en Parques Nacionales, en un predio, “pero por los medios locales nos enteramos que hizo cambios de planes así que fuimos a Gendarmería”, agregó.

De hecho, la funcionaria estuvo al mediodía en el laboratorio de criminalística del Escuadrón 34 de la Gendarmería Nacional, y previamente, junto al gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, encabezó la inauguración de instalaciones de Gendarmería Nacional en el Paso Fronterizo Internacional Cardenal Antonio Samoré. “Inauguramos algo muy importante para Bariloche que es el gabinete científico, que le va a permitir aquí a la Gendarmería no tener que llevar los elementos a la ciudad de Neuquén, como viene sucediendo, lo que retrasaba las pruebas de narcóticos”, dijo Bullrich al principio de la presentación. Como si hubiera sabido que se le venía un repudio público, apuró su retirada.