El sector audiovisual es industria

De igual manera habrá que remarcar las varias líneas de acción que el sector desempeña desde hace un tiempo, a partir de agrupaciones y prácticas tendientes a reforzar el trabajo que el cine y toda tarea audiovisual significan. En este sentido, es la Cámara de Empresas Productoras de la Industria Audiovisual de Rosario (Cepiar) la que ha impulsado de manera más persistente en sus propósitos. La Cámara cumple casi cuatro años de actividad, y entre sus logros mayores destaca la exención de ingresos brutos al sector. Hace días, Cepiar también logró otro hito tras el Primer Acuerdo Salarial con SICA APMA. El anuncio que se hará hoy constituye un peldaño todavía superior, porque abre un panorama mucho más alentador hacia una Ley Audiovisual que, de acuerdo con las premisas fundacionales de Cepiar, “fomente y establezca las bases para el desarrollo sostenible de nuestro sector con impronta industrial y duradera”.

“Es un acontecimiento muy importante para el sector, obviamente, pero no deja de serlo para toda persona, porque todos sabemos que estamos atravesando tiempos muy complicados en lo productivo, por eso creemos que es una buena noticia para cualquiera”, explica Gastón Soso, titular de Cepiar, a Rosario/12. “Saber que se incorpora un sector como fuerza productiva viene a poner un rótulo, una formalidad, a algo que de alguna manera nosotros sentimos se venía dando hace varios años. Se trata de una industria incipiente, pero es una industria, aun cuando muchas veces, y desde el seno del sector, uno se compare con otros lugares, como lo suele significar la producción que se da en Buenos Aires. Hay que empezar a darse cuenta de que somos una empresa, y de que ésta es la manera de hacer sustentable esta forma de vida. Por eso, creemos que es una gran noticia para nosotros. Y, más allá de lo partidario, hay un gobierno que, mientras el país atraviesa una de las peores crisis de los últimos años, toma sin embargo una decisión que apunta a fortalecer un sector que necesita de este apoyo. Un sector que hasta ahora se encontraba un poco huérfano de este tipo de acompañamiento por parte del estado”, agrega Soso.

-- ¿Qué beneficios trae aparejados el reconocimiento industrial?

-- Concretamente, viene a formalizar la exención de ingresos brutos, que fue el primer paso que dimos hace un año y medio, algo que ahora ya deja de ser un detalle o un apoyo aislado, y comienza a formar parte de una política más completa que incluye, por ejemplo, acceso a créditos blandos, algo que tiene cualquier industria a través del Ministerio de Producción, y a ciertas líneas de préstamos que el gobierno siempre implementa. Ahora vamos a estar incluidos en esa política, algo que antes no ocurría. Esos créditos tienen unas tasas muy inferiores a las del mercado. Por otro lado, se brindará apoyo y formación. Habrá apoyo para comenzar a exportar, algo que en el caso nuestro es una materia pendiente, ya que son pocas las empresas que exportan y podrían serlo muchas más. Habrá también apoyo desde el Ministerio de Producción para aprender sobre nuevos mercados, así como apoyo económico para poder visitar ferias donde se hacen las rondas de negocio, donde poder conocer potenciales clientes. Comienza a haber todo un carácter industrial hacia el cual uno se sentía un poco ajeno, ya que había una deuda del estado hacia el sector, pero esto lo viene a saldar. Obviamente, habrá que sostenerlo en el tiempo y encontrar resultados.

-- Vale destacar una tarea sostenida por parte del gobierno provincial.

-- Para hacer honor a la verdad, desde que empezaron las reuniones a las que convocaron en su momento, hace cuatro años, los Ministerios de Innovación y Cultura y de Producción bajo el nombre “Cadena de Valor de Empresas y Emprendimientos de Base Cultural y Creativa”, empezó una gestión puntual que hoy arriba a este resultado, algo que viene a convalidar el nombre mismo que nosotros habíamos decidimos ponerle a nuestra Cámara. Y esto no es poco, porque cuando en su momento nos parecía muy arriesgado y pretencioso nombrarnos “industria”, porque era verdad que sentíamos que faltaban cosas, ahora ya hay algo más en ese sentido, algo que reafirma esa voluntad y orientación que le dimos a un colectivo, a un grupo de trabajo y de voluntades. En estos tiempos tenemos que pujar para que el sector siga vivo, y ahora, con esta herramienta, creo que se aliviana un poquito la carga de estos días.

-- Podemos decir que Cepiar se consolida todavía más en su cometido, a través de una persistencia de trabajo.

-- Sentimos que en esto hemos dejado mucho esfuerzo, y creemos que se trata de algo que beneficiará no sólo a la Cámara. Ahora podemos decir que la industria del cine, en Rosario y en Santa Fe, puede decirse industria, con nombre y apellido. Es algo emocionante. Y creemos que tiene que ver, por lo menos un poquito, con el grano de arena que fuimos poniendo desde la Cámara. Esto tendrá que ser aprovechado no sólo en términos simbólicos, sino sobre todo desde una manera fáctica y por el sector audiovisual entero. Desde Cepiar tratamos de llevar al sector hacia una formalización lo más cercana posible a ese ideal que uno tiene de industria.