La compensación que los usuarios deberán pargarle a las distribuidoras de gas, para resarcirlas por la devaluación, continúa sumando rechazos entre los aliados de Cambiemos. "Genera al usuario una dificultad muy grande", reconoció el gobernador de Mendoza y titular de la UCR, Alfredo Cornejo, cuatro días después de que se difundiera la resolución de la Secretaría de Energía. Por su parte, el senador de origen radical Eduardo Costa sentenció que los santacruceños "no pueden tolerar un nuevo aumento de estas características en un servicio que es indispensable".   

Cornejo criticó que "el Gobierno nacional intente que paguen lo mismo los productores y los usuarios". "Es una salida que, en teoría, suena bien, pero en la práctica termina generando al usuario una dificultad muy grande", apuntó el mandatario provincial. 

El gobernador de Mendoza ya había mostrado, a principio de año, su desacuerdo con el tarifazo pergeñado por el ex ministro de Energía Juan José Aranguren, a quien había caracterizado como un funcionario con "nula articulación política", y hasta había propuesto el pago en cuotas de una tarifa plana y la suspensión de los aumentos hasta fines de 2019, poco antes de que la oposición consiguiera sancionar una ley contra el tarifazo, que fue vetada por el presidente Mauricio Macri en junio. Lejos de las críticas públicas de la UCR, la alianza gobernante continúa con los aumentos y ahora amenaza con que si no se paga este retroactivo las tarifas subirán aún más en el futuro.

El otro aliado que se opuso a la decisión del Gobierno fue el empresario y senador de Santa Cruz, Costa, quien sostuvo que sus coprovincianos "no pueden tolerar un nuevo aumento de estas características en un servicio que es indispensable". "El Gobierno nacional debería contemplar el caso de los santacruceños", advirtió el legislador, en diálogo con Radio con Vos. A principios de septiembre, la Casa Rosada ya tuvo que dar marcha atrás con la reducción del plus por zona desfavorable en las asignaciones familiares pagadas en la Patagonia y en el norte del país. 

El primero en mostrar su disconformidad con la medida fue el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, quien confesó que "sobre el tema tarifas habíamos hablado otra cosa".  "No comparto, ya las boletas han venido muy elevadas. Y si bien se mantiene la tarifa social en todo el país creo que la clase media, que es la base electoral del Gobierno, está siendo fuertemente impactada”, apuntó el dirigente radical.

En mayo pasado, a pesar de las diferencias públicas manifestadas por el radicalismo, el interbloque de Cambiemos (con todos sus aliados) votó contra la iniciativa aprobada por la oposición para retrotraer las tarifas a diciembre del año pasado y ajustarlas por inflación en el caso de los usuarios particulares. En aquel momento, Cambiemos tildó de "demagógicos" a los bloques opositores por rechazar el cronograma de aumentos. El próximo jueves 18, el radicalismo se tendrá que enfrentar nuevamente a esa disyuntiva cuando, por iniciativa de la oposición, se trate en una sesión especial la derogación de la resolución 20/2018.