Durante su exposición frente a la Bicameral de Seguridad del Congreso Nacional, la ministra Patricia Bullrich acusó a la Procuraduría de violencia institucional de estigmatizar a las fuerzas de seguridad, que deben dejar de ser “sometidas y destratadas”. La ministra de Seguridad defendió una vez más la doctrina que impregnó su gestión y reforzó su apoyo incondicional a las fuerzas de seguridad. Al exponer frente a la Comisión Bicameral afirmó que cuando asumió, en diciembre de 2015, “había una ideología de estigmatización automática hacia las fuerzas” y se vanaglorió por haberlo revertido “redignificando” la labor de los uniformados. 

En su exposición, la ministra criticó a la Procuvín por sus denuncias contra el accionar ilegítimo de las fuerzas de seguridad. “Encontramos casos en los que una serie de organismos del Estado, como la Procuvin, frente a un hecho se presentaban inmediatamente sin saber lo que había sucedido. Había una ideología de la estigmatización automática hacia las fuerzas y hemos generado una reversión de esto”, celebró la ministra, la misma funcionaria que respaldó al policía Luis Chocobar después de que le disparara por la espalda a un hombre que huía luego de cometer un robo y que defendió a los gendarmes que participaron de la represión a la comunidad mapuche durante la cual desapareció Santiago Maldonado. 

Bullrich subrayó que lleva adelante una “reconstrucción de la dignidad, de la ética y del salario que tienen que tener las fuerzas de seguridad para dejar de ser fuerzas sometidas y destratadas, y tener una ubicación de acuerdo a la tarea que el Estado les encomienda”. “Nosotros hemos analizado los casos de acuerdo a las conductas presentes y no a una estigmatización ideológica previa, que siempre sostiene que el culpable es el policía o el gendarme o quien fuera de la fuerza de seguridad”, agregó una Bullrich orgullosa de encarnar la nueva doctrina de seguridad impuesta durante el gobierno de Mauricio Macri.

Una vez terminada su exposición, el diputado del FPV-PJ Juan Cabandié cuestionó la participación de las fuerzas armadas en la seguridad interna. “Han roto una tradición democrática” respetada por todas las administraciones, advirtió el nieto recuperado, quien atribuyó la decisión de la alianza gobernante a la presión de Estados Unidos.