El piloto finlandés Kimi Raikkonen ganó ayer el Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1, con el británico Lewis Hamilton tercero y el alemán Sebastian Vettel cuarto, por lo que el inglés tendrá que esperar al menos hasta el GP de México para coronarse campeón por quinta vez. Raikkonen, que no ganaba un GP desde 2013, logró un triunfo 113 carreras después tras adelantar a Hamilton en la salida y conservar su ventaja en las últimas curvas en el Circuito de las Américas, en Austin, Texas. El holandés Max Verstappen (Red Bull) fue segundo tras largar en la decimoctava posición.

“Felicidades a Kimi y gran trabajo de Max también. Esto fue lo mejor que pudimos hacer”, apuntó Hamilton tras la carrera. “Obviamente estoy mucho más contento que de haber acabado segundo”, dijo por su parte el veterano Raikkonen, de 39 años, y que dejará la Scuderia al final de la campaña rumbo a Sauber.

Hamilton, que había logrado la pole el sábado, no pudo mantener su lugar en la grilla de salida y rápidamente se vio segundo por detrás del finlandés. El de Mercedes prefirió ser conservador, sabiendo lo que se jugaba, y no presentó batalla. Mientras, detrás, Vettel luchaba por acercarse a la cabeza luego de largar quinto, tras ser penalizado el viernes con tres posiciones al sobrepasar el límite de velocidad con una bandera roja en pista. Sin embargo, el alemán cometió un error en la primera vuelta al intentar adelantar a Daniel Ricciardo (Red Bull) y, luego de tocarse, se salió de la ruta, sufrió un trompo y perdió casi 20 segundos, dejando el título de Hamilton en bandeja.

El británico recuperó el primer puesto tras entrar en boxes, acariciando el quinto título que lo hubiera situado al mismo nivel de Juan Manuel Fangio, y a dos del record absoluto del alemán Michael Schumacher, pero tuvo que entrar de nuevo a cambiar neumáticos al final, debido a la elevada degradación de sus ruedas, y cedió la victoria. Al final, se acercó a los dos primeros, llegó a pasar a Verstappen pero, en su duelo con el holandés, se salió de la pista y prefirió conservar su último sitio en el podio mientras, por detrás, Vettel adelantaba a Valtteri Bottas (Mercedes) y se permitía soñar al menos una semana más con una remontada que parece imposible.

Hamilton, con 346 puntos, tiene una ventaja de 70 con respecto a Vettel (276) cuando faltan únicamente tres pruebas para el final del campeonato. Sólo un milagro o una hecatombe, México coronará de nuevo al británico como el rey de la Fórmula 1. Por quinta ocasión.