El intendente de La Plata, Julio Garro (Cambiemos), en una demostración de que su partido no es gay friendly y que no se toma en serio la organización de la semana del Orgullo, prohibió la 5ª Marcha del Orgullo Tlgbi, que se celebrará, mal que le pese, el 10 de noviembre. 

En un comunicado, los colectivos organizadores manifestaron: “La comisión, conformada por más de treinta organizaciones sociales, de derechos humanos, sindicales, estudiantiles y políticas, se viene reuniendo desde abril, cumpliendo los procedimientos administrativos correspondientes para informar y solicitar al Municipio su intervención. Sin embargo, la respuesta fue suspender la marcha a tan sólo cinco días, argumentando que no contaban con personal de Control Urbano para garantizar la seguridad. La decisión política de Cambiemos es apoyar y brindar seguridad a otros eventos que se realizarán ese mismo día, negándonos y coartándonos la libertad de expresarnos y manifestarnos públicamente”. 

Claudia Vásquez Haro, de Otrans Argentina, manifestó: “Ya desde que estaba en campaña tuvimos problemas con Garro. Una de sus consignas fue que darnos trabajo a nosotras (el colectivo trans) era dárselo a delincuentes”.

La prohibición de la Marcha se enmarca en una pelea de larga data entre el intendente y organizaciones y colectivos de muy variada procedencia. El 31 de octubre, se movilizaron más de cincuenta organizaciones (derechos humanos, trabajadores callejeros, músicos ambulantes, trabajador@s sexuales) en repudio al nuevo Código de Convivencia, del que aseguran que “tiene como objetivo reprimir la protesta social, así como el trabajo ambulante y a las compañeras trans y travestis en situación de prostitución, entre otros”. Las mismas críticas que se le hacen al Código de Convivencia de la Ciudad de Buenos Aires, que también se autodefine como gay friendly y organiza, antes de la Marcha del Orgullo, una “semana del orgulloba”. 

“En La Plata la represión y persecución a nuestro colectivo es feroz. Hay connivencia entre la policía, algunos fiscales y jueces y el Servicio Penitenciario y se llega a límites inhumanos. El diario El Día justifica las razzias y las detenciones arbitrarias y las titula como operativos contra ‘bandas de narcotravestis’, todas las travestis somos narcos para ese diario”, denuncia Vásquez Haro. Y ejemplifica: “La fiscal Ana Medina justifica todas las detenciones arbitrarias, que disimulan con el paraguas de la ley que pena el narcotráfico”.

Con respecto a la escasez de personal policial para la seguridad de la marcha, los grupos organizadores de la Marcha del Orgullo destacan que el sábado 10 tendrán lugar en la capital provincial dos eventos multitudinarios: un recital de Roger Waters y un festival en la Ciudad de los Niños, para los cuales no se planteó ninguna imposibilidad ni carencia. “Es evidente que es una decisión política. Prohíbe la marcha, que venimos organizando desde abril, y no otro evento, si realmente no pueden hacerse las tres cosas el mismo día”, asegura Vásquez Haro. “El problema es que ni Vidal ni Garro implementan el cupo laboral y después persiguen la prostitución. Por eso el lema de este año es ‘Basta de torturar y matar a travestis y trans’. Porque la Marcha la hacemos igual y responsabilizamos al gobierno municipal y al provincial por cualquier violencia hacia quienes movilizamos. Mañana, además, vamos a presentar un hábeas corpus en los tribunales provinciales para garantizar la Marcha”, cerró la activista.