1 (4) Central: Ledesma; Bettini, Caruzzo, Ortiz, Parot; Camacho, Gil, Ortigoza, Diego Becker; Lovera; Zampedri. DT: Edgardo Bauza.
1 (2) Temperley: Castro; Mazur, Paz, Demartini, Prieto; Mancinelli, Brum, Di Lorenzo, Cerutti; Leandro González, Costa. DT: Cristian Aldirico.
Goles: ST: 7m Zampedri (C) y 45m Mazur (T).
Cambios: ST: 20m Pereyra por Lovera (C), 25m Wilchez por Cerutti (T), 30m Lioi por Diego Becker (C), 31m Giornada por Leandro González (T), 35m Reinhart por Di Lorenzo (T) y 41m Ruben por Zampedri (C).
Árbitro: Andrés Merlos.
Cancha: Mario Alberto Kempes (Córdoba).
Definición por penales: convirtieron para Central Ortigoza, Ruben, Camacho y Gil; Prieto y Mancinelli para Temperley. Desviaron Castro (T) y Caruzzo (C), y Ledesma le desvió el remate a Costa (T).
Central sufre porque su juego no encuentra respuestas. Lo padece en Superliga cada semana y también en Copa Argentina, aunque es finalista. Llegó al partido decisivo después de tener que ir a la definición por penales, por empate de Temperley en tiempo de descuento. Y como ocurrió ante Talleres y Almagro, Jeremías Ledesma se lució con otro tiro penal atajado en la definición para orientar a Central al triunfo.
Central juega mal al fútbol y el problema no es el equipo. Ayer Bauza intentó renovar la ofensiva con los ingresos de Diego Becker y Lovera. Pero como en todo el año las oportunidades llegaron en pelota parada y cabezazos de Zampedri. Porque a la hora de elaborar fútbol con pases, Temperley fue más preciso, incluso a pesar de que jugó bajo una persistente presión impuesta en el medio por los canayas.
No le faltó decisión a Central. Salió decidido a jugar en campo rival, ahogó a Temperley con recuperación de pelota en el mediocampo, pero ese esfuerzo no es suficiente si después no hay aciertos en pases y movimientos. Con pelota rodando, Central no llegó al área. Su única aproximación fue con un derechazo apenas alto de Lovera desde fuera del área, allá por la media hora de juego.
Ante tanta marca en el medio, Temperley cometió infracciones y Gil lanzó muchos tiros libres al área. Pero Zampedri ganó de corner, primero con un cabezazo bajo que se perdió sobre el segundo palo y luego con un frentazo que se fue alto.
Cuando Temperley bajó el ritmo de sus faltas, el partido encontró más dinámica y el celeste logró asumir juego en campo rival. Y llegaron las mejores ocasiones de gol. En su primera atajada Ledesma desvió la pelota sobre el palo izquierdo en un tiro libre de Mancinelli, y en su segunda aparición el uno se lanzó sobre su derecha y sacó al corner un tiro libre alto de Cerutti.
Lo que cambió en el segundo tiempo es que Central pudo armar una jugada de gol. Diego Becker recibió un pelotazo por izquierda hasta el fondo, levantó la cabeza y puso un pase por arriba al área chica que Zampedri resolvió con cabezazo limpio frente al arco para marcar la diferencia.
La ventaja no tranquilizó a Central. El equipo del Patón solo fue un poco más prolijo con la pelota pero hizo muy poco en ataque, quizá confiado por la imposibilidad que tuvo el rival de llegar al área de Ledesma.
Temperley no tenía talento ni velocidad para pisar el área de Central con la pelota al pie. El partido fue intrascendente. Pero llegó lo inesperado cuando Ortiz rechazó hacia adentro una pelota que llegó por arriba y Mazur apareció en el punto del penal para marcar el empate con toque al palo derecho cuando Ledesma corría al izquierdo. El celeste lo empató en los últimos segundos. Pero falló en la definición por penales con remate alto de su arquero Castro y Ledesma le desvió con volada hacia su derecha al tiro a Costa. La definición tuvo suspenso porque Caruzzo la tiró por arriba del travesaño, aunque en el quinto disparo convirtió Gil y Central es otra vez finalista de Copa Argentina.
