El procurador general de la provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand, confirmó que Rodolfo Orellana, el militante de la OLP-Ctep que fue asesinado ayer durante una toma de tierras en La Matanza, murió por un disparo que ingresó por su espalda y salió por el rostro. El funcionario no descartó el disparo pudiera salir de un arma policial pero fogoneó la versión del enfrentamiento entre vecinos: “Este deceso se produjo en el marco de una situación de conflicto en el territorio”.

El dato de la muerte por un disparo descarta la versión de una herida producto de un objeto cortante surgió de la autopsia preliminar, que no halló en el cuerpo de la víctima el proyectil. Debido a esto, por el momento “no se pude determinar el calibre” de la bala “y va a ser difícil” precisar en lo inmediato el arma desde la cual fue disparada, señaló el jefe de los fiscales.

Lo que se determinó fue “el ingreso de un proyectil de arma de fuego con orificio de entrada por la zona del omóplato y de salida en la zona facial, a la altura de la nariz”, detalló Conte Grand y agregó que la bala “no quedó dentro de la cavidad física”. Por este motivo, “no puede determinar  el calibre y va a ser difícil (hacerlo) desde una pericia balística”, arriesgó.

El funcionario explicó que tanto el calibre de la bala como “las características eventuales del arma” con que se le disparó a Orellana será determinado “en los peritajes definitivos”. No obstante, reconoció que “en función del diámetro de los orificios de entrada y salida, y el trayecto interno” del proyectil en el cuerpo, pueden dar algunos indicios preliminares para determinar si el disparo provino de un arma policial o no.

Conte Grand aseguró, además, que el predio “estaba a cargo de la Justicia Federal” y que por ello era “protegido por personal de la policía asignado a esa tarea” y que “no portaba armas letales”. No obstante, aclaró que cuando comenzó el desalojo del intento de toma “se acercaron efectivos de seccionales cercanas en dos patrulleros, con policías que estamos investigando si tenían armas de fuego”.

Lo que sí está determinado es que “el disparo se produjo desde la espalda”, dijo. Mientras tanto, la forma que tiene el Ministerio Público para sumar elementos de prueba son las declaraciones testimoniales que se les tomarán a los cuatro detenidos tras el intento de toma de tierras y a otras personas que estuvieron esa madrugada en el predio.

También se citará a la médica que atendió a la víctima en la guardia del hospital Alberto Balestrini, y que fue quien “indicó que solo pudo verificar la existencia de una lesión ene l cuerpo compatible con un elemento punzante”.