En la apertura de las sesiones del G-20 y ante la posibilidad cierta de que la Cumbre termine sin documento final por los desacuerdos, el presidente Mauricio Macri sostuvo que “la esencia del G-20 es promover el diálogo que respete las diferencias” y le pidió los líderes mundiales “crear consensos para los próximos diez años”. El mensaje de apertura fue lo único que se transmitió públicamente, el resto de la sesión de presidentes transcurrió a puertas cerradas. 

“En un mundo adverso y con multiplicidad de protagonistas, la esencia del G20 es promover el diálogo que respete las diferencias”, sostuvo el Presidente y agregó: “La solución es dialogar, dialogar y dialogar” porque “esa es la forma de empujar los límites de lo posible”. Aunque el Gobierno buscó correr del temario los puntos más conflictivos para evitar que la Cumbre fracase, al inicio de las discusiones reinaba el pesimismo respecto a que se llegue a un consenso necesario para firmar el documento. Las principales diferencias giran en torno al comercio y al cambio climático. La guerra comercial entre Estados Unidos y China, más altercados recientes como el de Rusia respecto a Ucrania, marcan el tono de la Cumbre.

“Tenemos la obligación de mostrarle al mundo qué problemas globales necesitan soluciones globales”, dijo en otro tramo de su intervención y sostuvo que esperaba que “en este día y medio de trabajo logremos crear los consensos para los próximos diez años”. En el salón de sesiones montado en Costa Salguero, el Presidente le pidió a los jefes de Estado presentes dar “un mensaje claro al mundo: que desde aquí podemos juntos marcar un horizonte de desarrollo, con responsabilidades compartidas, y con un fuerte compromiso con la igualdad de género, y unidos en la diversidad”.

En cualquier caso, reconoció que “el consenso no se construye de la noche a la mañana, es un proceso con avances y retrocesos y que continúa después del G-20”.

En otro pasaje, Macri hizo un tributo al fallecido líder sudafricano Nelson Mandela, a quien suele mencionar como uno de los personajes favoritos de la historia. “Quiero recordarlo, es alguien que siempre he admirado mucho, y que nos invitó terminar con la pobreza”, contó. Al inicio de su exposición, que duró cerca de nueve minutos, Macri recordó que ya habían pasado diez años desde que los líderes del G-20 se reunieron por primera vez, y destacó que el actual es el primer encuentro de este tipo en Sudamérica. 

“Quiero decirles que esta cumbre es un hecho inédito, nunca en la historia de nuestro país han convergido tantos líderes al mismo tiempo”, remarcó.

El Presidente dijo que lo interpretaba como “un gesto de apoyo y reconocimiento a la presencia y el desempeño de la Argentina en el escenario global, sobre todo después de tantos años de aislamiento”.

Y, destacó la posibilidad de encuentro que el foro representa al señalar que “aquí los líderes nos encontramos cara a cara, hablamos con franqueza y ratificamos coincidencias y administramos diferencias”.