Se aprobó en la Legislatura porteña una nueva normativa de habilitación para los espacios culturales independientes, uno de los temas a resolver más urgentes del sector cultural en la Ciudad. Con 56 votos afirmativos y dos abstenciones, el proyecto impulsado por el ministro de cultura Enrique Avogadro se implementará a partir de marzo de 2019 y, aunque convivirá con el resto de las leyes sobre la materia que hay en la Ciudad de Buenos Aires, pretenderá “facilitar los procesos de habilitación, promover el desarrollo de propuestas culturales diversas y potenciar el funcionamiento de los espacios.” 

Trabajada en conjunto entre distintas áreas del Gobierno de la Ciudad (entre ellas la Agencia Gubernamental de Control, encargada de clausurar los espacios) y las asociaciones que representan a los espacios culturales, la ley Espacios Culturales Independientes (ECI) reconoce como espacio cultural a aquellos con “hasta 500 metros cuadrados de superficie” y con capacidad “hasta 300 personas” en los que se realizan actividades y exposiciones relacionadas al arte y la cultura. Entre los puntos centrales, se admite el baile (algo que había quedado excluido de la ley MECA de 2014 y que es motivo constante de clausura); se permiten actividades complementarias como ofrecer servicios de comida y venta de productos culturales; se establece la exención del pago de tasas y derechos para el trámite de habilitación y se crea un espacio de control por parte del Ministerio de Cultura para que los espacios no puedan ser clausurados inmediatamente ante la falta de alguna documentación que no sea crítica.

“Desde el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires buscamos que los espacios culturales independientes, en su mayoría autogestionados con dedicación y esfuerzo, mejoren su funcionamiento porque creemos que es fundamental para la cultura de Buenos Aires que estos espacios subsistan y se desarrollen plenamente”, expresó a PáginaI12 Avogadro, que estos últimos meses también impulsó cambios en la ley de mecenazgo y lanzó el programa Pase Cultural. Según anunció su cartera, aquellos espacios que lo deseen podrán migrar a la nueva ley ECI a partir de marzo y tendrán la posibilidad de abrir el espacio una vez que realicen la presentación del trámite de habilitación.

Si bien desde Artei, Escena, Clumvi, Meca y Abogades Culturales –entre otras asociaciones culturales que participaron de la discusión en torno al proyecto–se señalaron durante el debate algunos temores como la posibilidad de que cualquier bar sin programación se enmarque como espacio cultural o que a raíz de la nueva ley se fusionen los instituciones de fomento a la cultura independiente, en general sus referentes coincidieron en que la nueva normativa mejorará diversos aspectos habilitatorios para los espacios. Como sea, todo eso se verá a comienzo del próximo año, cuando la ley entre en vigencia.