La Iglesia se expresó en contra de la legalización de las apuestas on line en la provincia de Buenos Aires a partir que se incorporó como un artículo en reciente sanción de ley Fiscal e Impositiva que impulsó la gobernadora María Eugenia Vidal. “Lamentamos el cambio que dio la gobernación provincial en este tema ya que se había manifestado con convicción en contra del juego, inclusive con acciones concretas y decisiones hacia futuro”, señaló la Comisión Nacional de Pastoral de Adicciones y Drogadependencia de la Conferencia Episcopal Argentina en un texto titulado “Cada casa puede ser un casino”. 

“No creemos que se justifique esta decisión argumentando que este negocio se da en la clandestinidad. Se antepone un objetivo meramente recaudatorio y legalizan el negocio de unos pocos sin considerar los daños que deja”, apuntó la comisión que encabeza el sacerdote José María “Pepe” Di Paola. “Cualquier joven desde el celular podrá estar en línea con la enorme oferta que presenta el juego on line, la población de alta vulnerabilidad en la que vivimos recibirá mensajes ambiguos y peligrosos”, agregaron los representantes de la Iglesia Católica en el documento.

“Este tema de tanta importancia no tuvo la posibilidad de ser discutido por la sociedad como corresponde, ya que se lo incluyó dentro una ley de carácter más amplio”, aseguraron observando uno de los puntos por el que el bloque peronista de la legislatura bonaerense también había mostrado su oposición a votarla entremezclada en las leyes de Endeudamiento y el Presupuesto 2019.

“Como Pastoral de Adicciones que vivimos y trabajamos en un sector de personas muy vulnerables, vemos con preocupación la falta de diálogo y las consecuencias que lleva la aprobación de esta ley”, y concluyeron que “la situación social y económica por la que atraviesa la provincia de Buenos Aires demanda que las atenciones de los barrios más pobres tengan políticas públicas que promuevan el desarrollo integral de los jóvenes y de la familia, y que no se convierta cada casa en un casino”.