Un juez federal del estado de Texas declaró inconstitucional el sistema de atención médica conocido como “Obamacare”, una decisión que los demócratas prometieron apelar. La sentencia fue dictada el viernes por la noche por el juez Reed O’ Connor, luego de que varios fiscales republicanos y dos gobernadores opuestos a la ley de Atención Sanitaria Asequible (ACA) presentaran la demanda. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, abiertamente opositor a uno de los legados considerados de los más preciados del ex mandatario Barack Obama, no tardó en expresar su deleite ante la decisión. “Es una gran noticia para Estados Unidos. Como lo predije, el Obamacare fue derribado por ser un desastre INCONSTITUCIONAL”, tuitió el mandatario. La Casa Blanca, por su parte, dijo que espera que el caso sea apelado ante la Corte Suprema. “En espera del proceso de apelación, la ley sigue vigente”, aclaró en un comunicado de prensa. 

El fallo llega meses después de que se aprobara una reforma fiscal conocida como “mandato individual”, en la que se eliminaron las multas a la obligación de tener un seguro médico. Ayer el juez dio un pasó más al fallar que la obligación de tener seguro médico es inconstitucional y por ende inhabilitó toda la ley.

Por su parte, el demócrata Xavier Becerra y fiscal general de California, anunció que presentará un recurso contra la decisión de O’Connor, abriendo así una batalla legal que probablemente terminará de nuevo en el Tribunal Supremo. “El fallo es un ataque a 133 millones de estadounidenses con condiciones preexistentes, a los 20 millones de estadounidenses que dependen de la ACA para la atención médica, al progreso de Estados Unidos hacia la atención médica asequible para todos los estadounidenses”, dijo Becerra en una declaración. El fiscal afirmó además que la lucha para salvar al Obamacare recién empieza. 

El Alto Tribunal ya falló en dos ocasiones a favor del Obamacare. Una en 2012 por cinco votos a cuatro y otra en 2015 por seis votos a tres. En ambas ocasiones, el juez conservador John Roberts votó junto a los cuatro demócratas para decantar la balanza del tribunal. En el caso de 2015 también votó a favor de Obamacare Anthony Kennedy, quien este año fue reemplazado por Brett Kavanaugh. 

Luego de celebrar la decisión, el mandatario estadounidense instó al líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, y a la futura presidenta demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, a que aprueben una nueva ley que brinde que brinde atención médica. Furiosos, los demócratas acusaron a los republicanos de lo que consideran una debacle que dejará a millones de estadounidenses sin atención médica. “El fallo expone el monstruoso desenlace del ataque de los republicanos a personas con condiciones preexistentes y al acceso de los estadounidenses a una atención médica asequible”, denunció Pelosi en un comunicado. La próxima presidenta de la Cámara de Representantes prometió además que cuando los demócratas tomen el control de la Cámara (en enero), los legisladores se moverán rápidamente para intervenir formalmente en el proceso de apelación para defender Obamacare. Los demócratas utilizaron la promesa de defender el programa de cobertura médica como una de sus estrategias de campaña en las elecciones de medio de término de noviembre. 

“La cruzada legal de #Republicanos contra la ley AtenciónSanitariaAsequible es un truco político peligroso que pone en riesgo la cobertura de salud y las protecciones vitales para la salud de millones de estadounidenses”, denunció ayer el senador demócrata Sheldon Whitehouse, en la red social Twitter. A sí también sumó sus críticas el congresista demócrata Joe Kennedy: “encontraron  un juez que estaba de acuerdo, y ahora la expansión de Medicaid podría desaparecer, las protecciones por condiciones preexistentes se podrían eliminar, los precios dispararse y millones perder el seguro. Y lo llaman éxito.”

La sanción de la ley que impulsó el ex presidente demócrata apuntó en principio a lograr que la totalidad de los ciudadanos estadounidenses tuviesen seguro médico. En caso de no hacerlo, la ley suponía una multa. Para aquellos con ingresos bajos se establecieron créditos fiscales con el fin de subvencionar el pago del seguro de salud y para ello se valió de Medicaid, el programa de salud del gobierno de EE.UU. para personas de bajos recursos. Además, antes de promulgada la ley en 2010, las aseguradoras estadounidenses estaban habilitadas a subir los precios de los seguros médicos en función de las enfermedades padecidas por sus clientes. De esta manera, alguien que hubiera sufrido, por ejemplo, un cáncer, pagaba más por sus pólizas que alguien con un historial sano.

El desmantelamiento del Obamacre fue una de las promesas de campaña de Trump. En octubre de 2017, y luego de varios fracasos en el Congreso por la fuerte división interna en el propio bando republicano, el actual presidente logró empezar a desarmar la ley mediante un decreto ejecutivo. El mandatario considera que la reforma sanitaria de su antecesor ofrece servicios médicos muy caros, viola la libertad de los individuos al obligarles a comprar un seguro médico y es demasiado restrictiva al impedir que los ciudadanos compren seguros médicos fuera de sus estados de residencia, aspectos que afirmó que está decidido a cambiar.