Tres personas continuaban en grave estado y con pronóstico reservado, ayer, tras la explosión ocurrida el sábado en el estadio del Club Deportivo Español mientras reubicaban tres termotanques, informaron ayer fuentes de los centros de salud donde quedaron internadas.

“Estaban realizando una prueba hidráulica y cuando purgaron los caños salió aire y había olor a gas”, aseguró el presidente del club Español, Diego Elías, y agregó: “Todo indica que fue un error humano”. “Lo que sucedió nos enluta como club”, sostuvo Elías quien informó que el mismo sábado se realizaron los peritajes en el lugar de la explosión y estimó que en las próximas horas la justicia levantará la clausura del estadio.

Los heridos son Agustín Falcón, de 28 años, vocal de la institución; Daniel Villarroel, de 41 años, socio del club y un gasista matriculado, de 50 años.

Falcón ingresó ayer al Instituto del Quemado, ubicado en el barrio porteño de Caballito, con “más del 90 por ciento del cuerpo quemado. Está con pronóstico reservado y conectado a un respirador artificial”, precisaron los médicos.

Gustavo, padre de Agustín, comentó que su hijo estaba ayudando al gasista a realizar el sábado un trabajo en el estadio, situado en el barrio de Parque Avellaneda, al momento del accidente; “la está peleando”, dijo en relación al estado de su hijo.

Elías se acercó al lugar para acompañar a los familiares del herido, mientras que más de 80 hinchas se presentaron en inmediaciones del instituto también para acompañar y dar fuerzas. Por su parte Omar y Manuel, dos simpatizantes del “gallego”, coincidieron en que Agustín “es un chico siempre dispuesto a trabajar”.

Los otros dos heridos permanecen internados en el Hospital Santojanni, ambos con quemaduras en más del 50 por ciento del cuerpo.

El primo de Daniel Villarroel, Víctor, comentó que su familiar “estaba en el club, como era su costumbre”. “Vio que estaban haciendo arreglos y como entiende de gas, le fue a indicar al gasista que algo estaba haciendo mal. Cuando se retiró unos 15 metros, algo explotó”, contó. 

La explosión ocurrió el sábado por la tarde debajo de la platea local del estadio del club, cuando los hombres se disponían a realizar cambios en la instalación de gas por un requisito del Gobierno de la Ciudad.

El trabajo consistía en reubicar tres termotanques que estaban en un sótano y debían colocarse a nivel del suelo.

Las causas que provocaron la explosión aún no fueron detalladas y la policía y bomberos de la Ciudad realizarían las pericias esta tarde, mientras el club permanecía clausurado y con custodia.

Luego del accidente, la institución elaboró un comunicado en el que expresó “el inmenso dolor” del club y la comunidad española y en el que se pone “a disposición” de los heridos y sus familiares.