Como anticipó en la campaña, el gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro avanzará con sus planes de reducir brutalmente el tamaño del Estado. Así lo confirmó el ministro de Infraestructura de Brasil, Tarcísio de Freitas, quien aseguró que evalúan privatizar o liquidar un centenar de empresas estatales hasta 2022. El brutal ajuste no se limitaría únicamente a la venta de empresas, también incluirá cierres de las que “no tienen tanto sentido”.

Según determinó el funcionario, el gobierno realizará en los próximos días un “mapa” de la situación de las 150 empresas estatales que dependen directamente del Ejecutivo, y sus subsidiarias. "Obviamente, no estamos hablando sólo de privatizaciones, sino también de liquidaciones de empresas que no tienen tanto sentido", declaró el ministro en una entrevista concedida a la radio CBN.

También ratificó que su cartera estudia los planes de concesiones y privatizaciones ya previstos por el expresidente Michel Temer, que incluyen puertos, aeropuertos, ferrocarriles y carreteras. Según detallaron medios brasileños, la lista estaría integrada también por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), el Banco de Brasil, Caixa y Eletrobras.

Bolsonaro anticipó que aprovecharía las privatizaciones para atraer inversiones, tanto nacionales como extranjeras, en el orden de los 7000 millones de reales (unos 1.876 millones de dólares) este mismo año.

Entre los casos que están bajo análisis, agregó el ministro, figuran unos 5.000 kilómetros de carreteras, así como los contratos de otros 4.000 kilómetros ya en manos privadas, pero con contratos que vencerán próximamente y podrían ser renegociados.

"Tenemos que ver todos los trechos (de carreteras) que tengan posibilidad de ser explotados comercialmente y pasarlos a manos de la iniciativa privada mediante concesiones, privatizaciones o sociedades mixtas", indicó. La intención del equipo económico de Bolsonaro, dirigido por el ministro de Economía, Paulo Guedes, un liberal formado en la Escuela de Chicago, es reducir al mínimo posible el tamaño del Estado.