Tras haber pospuesto el comienzo de la audiencia por casi diez horas y después de oír las últimas palabras de los acusados, el Tribunal Oral en lo Criminal número 3 de Jujuy anunció que a las 20.30 dará a conocer su sentencia contra la dirigente social Milagro Sala en el juicio en el que se la acusa de haber desviado fondos públicos destinados a la construcción de viviendas. "Hoy ustedes, señoras juezas, como mujeres y trabajadoras, pasarán a la historia por lo que ustedes decidan, sea para bien o para mal", advirtió Sala cuando le dieron la palabra. Al igual que el resto de los 30 acusados en el juicio por la causa que se conoce como Pibes Villeros aseguró que es inocente: "Todos mis compañeros y yo somos inocentes. No robamos nada y no es casualidad que nuestras obras sean reconocidas internacionalmente", sostuvo.

La sentencia llegará luego de seis meses de juicio. La causa está conformada por tres expedientes, que investiga el desvío de fondos destinados originalmente destinados a la construcción de viviendas por parte de cooperativas de la Tupac y de otras organizaciones sociales jujeñas.

A éste, su cuarto juicio desde que fue detenida en enero de 2016, Sala llegó acusada de asociación ilícita, extorsión y defraudación al Estado. Esta mañana, antes de que la audiencia fuera pospuesta, aseguró que a ella y al resto de los cooperativistas enjuiciados los acusaban "por pobres y coyas". 

Se esperaba que la audiencia final comenzara a las 8.30 de la mañana, pero el tribunal debió suspenderla luego de que supiera que uno de los acusados fue detenido el fin de semana por tráfico de drogas en Formosa. Se trata de Raúl Ezequiel Aguilera, uno de los hijos de la diputada provincial Mabel Balconte, quien integra la treintena de acusados junto a su madre y Sala y que, según registros oficiales, trabaja para la Gobernación de Jujuy. Según indicaron fuentes de la investigación a medios locales, Aguilera fue detenido el pasado fin de semana en Formosa por poseer cerca de un kilo y medio de cocaína con fines, presuntamente, de comercialización. 

Aguilera es, por otro lado, el único acusado para quien el Ministerio Público de la Acusación jujeño solicitó la absolución durante su alegato. La declaración indagatoria de él y su hermano, integrantes de una de las cooperativas de vivienda involucradas en la causa, durante el debate oral fueron puntas de lanza en la estrategia de la Fiscalía y el Poder Ejecutivo de Jujuy para incriminar a Sala en la causa. Entre llantos, declararon ante el tribunal haber sido "obligados" a cobrar cheques de fondos destinados a la construcción de viviendas.

Balconte, la madre de ambos, había completado la estrategia. Diputada electa por el espacio político de la Tupac Amaru, fue acusada poco tiempo después de la detención de Sala. En prisión, fue la que, sorpresivamente cambió su versión de los hechos y "confesó" haber acompañado a Sala una vez a Buenos Aires, en uno de los supuestos viajes que la dirigente social jujeña realizaba, según los dichos de la diputada, para entregar dinero al diputado Máximo Kirchner en la Quinta de Olivos. La defensa de Sala insistió durante el debate oral que los registros aeroportuarios desmienten lo declarado por Balconte.

Sala enfrenta condenas de más de 20 años de prisión. La defensa de la referente de la Tupac Amaru solicitó su absolución ya que consideró que "existe una orfandad absoluta para proceder a una condena". Durante sus últimas palabras, la dirigente se puso de pie y les habló a las juezas que integran el tribunal, María Alejandra Tolaba --la presidenta, designada a dedo en ese puesto luego de haber reprobado concursos en dos oportunidades--, Claudia Sadir y Ana Carolina Pérez Rojas: "Hoy ustedes, señoras juezas, como mujeres y trabajadoras, van a pasar a la historia por lo que decidan, ya sea bueno o malo. Nosotros, ni mis compañeros ni yo, robamos ni mentimos. Somos trabajadores", sostuvo Sala. A su lado, Raúl Noro, también acusado, reiteró su inocencia.