Luego de la conferencia conjunta entre el presidente Mauricio Macri y su par brasileño Jair Bolsonaro en el Palacio de Planalto, los mandatarios compartieron un almuerzo protocolar junto a ambas comitivas en el Palacio de Itamaraty, sede de la Cancillería brasileña. Allí repitieron algunas de las frases que habían expresado previamente respecto a las semejanzas entre ambos países y sus coincidencias en materia de política exterior. “Tanto a usted como a mí, nuestros pueblos nos han elegido porque querían un cambio de verdad”, celebró el mandatario argentino, mientras que Bolsonaro anunció la apertura de “un nuevo capítulo en la historia de los países”.

Al reiterar los supuestos “valores” compartidos entre ambos países, Bolsonaro adelantó que se propusieron “profundizar la cooperación contra el crimen”. “Nosotros como Brasil vamos a ser aliados firmes en esta lucha, como también va a ser un firme aliado de la construcción de una región más integrada, de más desarrollo y más oportunidades”, destacó el mandatario al pedir un brindis “por la felicidad de Macri y del pueblo argentino”.

El “cambio” que describió el argentino tiene que ver con “el respeto a los derechos humanos, las libertades y el respeto a la cultura del trabajo”, a esta última la relacionó “con la posibilidad de progresar a partir del aporte de cada uno de nuestros ciudadanos” , en línea con su discurso que ubica al esfuerzo de la sociedad como el único camino para salir de la crisis en la que está inmersa el país.

Al referirse a las conversaciones que mantuvieron respecto a la cooperación en materia de política regional ambos gobiernos de derecha, Macri prometió un “salto adelante del Mercosur”, además del fortalecimiento de “la confianza y el vínculo”. “Mas allá del fútbol, Argentina y Brasil están más juntos que nunca”, cerró el discurso con su infaltable referencia deportiva en medio de los encuentros protocolares.