Tras el impactante anuncio de que la actividad económica bajó 7,5 por ciento interanual en noviembre, la mayor caída en 10 años, economistas privados estiman que el primer trimestre de 2019 continuará con una caída del PBI y que recién podría moderarse a partir de abril, si es que se produce una buena cosecha de soja y un crecimiento de la demanda brasileña. Los analistas privados comenzaron a estimar cuándo podría revertirse esta tendencia que lleva 8 meses consecutivos de resultados adversos para el Gobierno de Mauricio Macri. Desde Ecolatina descontaron que el primer trimestre vaya a tener números favorables, primero porque se compara con el período enero-marzo del 2018, el último de signo positivo de la gestión Cambiemos. Para la consultora, si bien en este trimestre la cosecha de trigo superó la del año pasado (todo un récord con 19 millones de toneladas), no habrá recuperación del consumo interno porque los ajustes de salarios servirán para pagar los aumentos de tarifas. “Se tenderá a reducir el gasto en otros bienes y servicios para hacer frente al pago de los regulados (tarifas)”, destacó Ecolatina, que proyecta una caída del 1 por ciento del PBI para este año. Desde las oficinas de análisis económico del BBVA Banco Francés, también estiman que la economía bajará este año 1 por ciento, y le ponen cifras al descenso en el primer trimestre, 5 por ciento interanual. Algo similar destacan desde Orlando Ferreres y Asociados, cuyas estimaciones arrojan un resultado negativo para el primer trimestre, pero con un fuerte repunte de la actividad vinculada al comercio exterior debido a un tipo de cambio más competitivo y la recuperación de Brasil.

Esto último también fue destacado la semana pasada por el Ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne en el Foro Mundial de Davos.

Allí, ante los principales empresarios y financistas del planeta, Dujovne aseguró que “hay crecimiento en el mundo y para Argentina es muy importante lo que pase en Brasil (su principal socio comercial) cuya expectativa de crecimiento para este año es del 2 por ciento, luego de varios años de recesión”. El dato de Brasil no es menor porque si comienza a crecer no solo demandará más productos locales, sino que dejará de mandar sus excedentes a Argentina. Según Dujovne, el 2018 cerrará con una caída del PBI en torno al 2 por ciento –aunque para noviembre el Indec ya informaba un acumulado del 2,2 por ciento– y otro retroceso del 0,5 por ciento para este año.