“No estoy sorprendido sino muy contento con lo que sucede. Aunque confié en que estábamos listos para dar el salto, esta edición del festival supera mis expectativas en cuanto a la respuesta de la gente”, afirma Joaquín Speroni, creador, productor y programador del Buena Vibra, que tendrá en su edición de este sábado a Los Espíritus, Sara Hebe + Ramiro Jota, Usted Señálemelo, Bandalos Chinos, Marilina Bertoldi, Militantes del Clímax, Ainda Dúo y Las Ligas Menores, entre otros. Así como la vista de su departamento, desde el que se puede controlar casi todo lo que sucede en el barrio de Chacarita, este gimnasta incansable de la gestión en la escena independiente local está siempre divisando la novel oferta musical de todo el país. Y eso lo tradujo edición tras edición en un evento que creció de tal manera que dejó la Ciudad Cultural Konex para mudarse al microestadio Malvinas Argentinas. “Eso tuvo que ver con el equipo. Estamos muy contentos de trabajar junto a una productora como Rock & Reggae, que nos escuchó desde un principio y apostó por contener a toda esta masa de personas, padres, primos y nieto, para acercarle esta información.”

¿Por qué te asociaste a una productora de shows caracterizada por apoyar una movida tan endogámica, así como popular, cuando los artistas de tu festival se convirtieron justamente en la alternativa?

--Si bien están en la vereda de enfrente, trabajan con las bandas que de chico escuchaba como loco. Una es La Renga, cuyos shows en el estadio de Huracán fueron producidos por Rock & Reggae (creadores además de la fiesta Clandestina). Estaba obsesionado con ese grupo porque me parecía lo más grande de una generación a la que le gusta la buena música. Así que ese vínculo, a partir de esta experiencia, nos genera tranquilidad.

Pero vos te dedicaste a promover otra movida…

--Me encanta la actualidad. Parece que estamos viviendo uno de los mejores momentos en cuanto a la generación de músicos que se animan a armar proyectos, que apuestan, que viven el sueño de querer tocar para 10 mil personas. Hay mucho y la oferta es muy grande. Todos tienen la chance. Pese a que es una época difícil para la escena independiente, demostraron que se puede.

El Buena Vibra, ¿es un festival indie o uno de música independiente?

--De música independiente…

¿En qué basaste la curaduría de esta edición?

--En trabajar mucho, y en el entendimiento de ciertas bandas que estuvieron en ediciones anteriores y que demostraron una actitud muy buena con respecto a compartir escenario con otros. A pesar de que había más nombres, y de que estaban en una sala importante, se pusieron la fecha al hombro. Eso fue la señal de que teníamos que ir al Malvinas Argentinas, y apostar. Es sorprendente la manera en que crecieron, además en tan poco tiempo. Eso nos permitió acercarnos a Los Espíritus o a El Kuelgue, que nunca participaron en el evento. Si bien tiene muchas ediciones como ciclo, en el formato de festival éste será el tercer año del Buena Vibra. Y todos entendieron también que apuntamos hacia una misma intención: por eso en el cartel los nombres tienen igual tamaño.

¿Creés que se pueda acercar público de la vereda de en frente?

--Eso pasará cuando deje de ser menos terco como programador. Aunque escucho y estoy atento a lo que sucede, es cuestión de tiempo. Y más ahora que trabajo con gente que conoce las necesidades de ese público.

¿Dónde radica el riesgo en esta programación?

--En Banzai FC y Valdes. Son artistas que pasaron la barrera de lo independiente siendo independientes. Lograron crecer mucho, y coincidimos en una evolución que también evidencia el festival. Sin perder esa naturaleza, estamos haciendo algo masivo.

Más allá de que su origen sea cordobés, ¿sentís al festival La Nueva Generación como algo complementario o como un competidor?

--Está buenísimo. Su aparición me remite a esa expresión que dice que “en la unión está la fuerza”, y me ayudó a tener confianza en lo que hago. Cuando vi lo que sucedió en Córdoba en noviembre, me llenó de ilusión. Y con su creador, Eric Davies, tengo un excelente vínculo y admiración. Creo que La Nueva Generación está más enfocado en trabajar fechas de artistas puntuales, y desde la productora que armamos intentamos desarrollar año tras año algo épico. Por eso no creo que sigamos haciendo el ciclo en la Ciudad Cultural Konex: nos concentraremos en el festival a gran escala, y lo haremos una vez al año.

¿Cómo arrancó el Buena Vibra?

--Hace seis años, en el bar de unos amigos en Palermo, con circo y bandas en vivo. Soy malabarista, y quería generar material audiovisual. De manera que me copó mucho tener ese crudo. Era un ciclo de cumbia, música cubana y baile. Y todo salió bien. Ahí entendí que esto había que desarrollarlo.

¿Y en qué momento abrazaste a la escena?

--Mientras trabajaba como programador en Beatflow, refloté el Buena Vibra. No había encontrado el rumbo de lo que quería hacer. En esa época tenía un programa de radio, en Radio Cultura, con Goyo, cantante de Bandalos Chinos, por el que pasaron todos. Íbamos a sus recitales, y estaban llenos de gente. Dejé la estación, fui a Bitbox, y en la sala de Palermo hice mi primer año real en la producción. Ahí empecé a entender que se podía. Y en el primer Konex del festival, en 2017, que coincidió con la época en la que estaba desarrollando a Louta, tenía una expectativa que se triplicó el día del show porque vinieron 800 personas. Además de Louta, ahí estuvieron Warlock, Juan Ingaramo y Nairobi. Ese lo hice totalmente solo, pero después vino el equipo que hoy me presiona para ir a por más.

Nacido en Buenos Aires hace 30 años, Joaquín Speroni puso en circulación un festival “mágico”, adjetivo intrínseco en su diálogo, a partir de su propia búsqueda personal. “Cuando tenía que elegir una carrera, nunca entendí bien lo que quería hacer”, confiesa. “Por mi familia pensé que el rumbo estaba en la abogacía. Luego, por vínculos personales trabajé en las finanzas. Aunque tampoco me encontré. Lo mismo me pasó con el periodismo. Pero muchos amigos estaban en la música o relacionados con ella. Me di cuenta de que lo mío estaba ahí, y empecé a involucrarme cada vez más. Estudié un montón de cosas vinculadas al recital para entender el idioma, aunado al trabajo en muchas salas emergentes donde hay pocos recursos. Sin embargo, en esos lugares fui testigo, al igual que mucha otra gente privilegiada, de cosas que sabía que no volverían a suceder. Así fui armando una carrera, y hoy es un festival con dos escenarios para 12 mil personas. Y no tengo la menor duda de que quienes vayan al Buena Vibra vivirán uno de los momentos más mágicos de sus vidas.”

* Sábado 16 de febrero en el microestadio Malvinas Argentinas, Gutenberg 350, con shows de Ainda Dúo (14.40), Valdes (15.20), Banzai FC (16.00), Las Ligas Menores (16.40), Militantes del Clímax (17.20), Bandalos Chinos (18.00), Marilina Bertoldi (18.45), Louta (19.30), El Kuelgue (20.15), Usted Señalemelo (21.15), Los Espíritus (22.15) y Sara Hebe & Ramiro Jota (23.30).