• The Handmaid’s Tale (Fox). La tercera temporada llegará (probablemente) en abril en Hulu, y el trailer estrenado durante el SuperBowl calentó la expectativa con una referencia específica a la campaña “Morning in America” de Ronald Reagan en los ‘80. Mientras DeFred / June advierte que “la mañana se acabó” en Gilead, es un buen momento para que aquellos que oyeron hablar de la serie pero aún no la vieron se pongan al tanto... sobre todo en una Argentina donde algunos militantes antiderechos parecen salidos directamente de la pantalla. La primera temporada es fiel al libro original de Margaret Atwood; la segunda es una reinterpretación de lo que significa la vida cotidiana para las mujeres en ese escenario. En ambas, Elisabeth Moss la descose toda.
     
  • Better Call Saul (Netflix). Se la espera tanto, y se termina tan rápido... Vince Gilligan y Peter Gould consiguieron el milagro de un spin off tan bueno como el original. E incluso hay quien sostiene que la saga del abogado supera a Breaking Bad. Dejemos el estéril debate a un lado: filmada y escrita en altísimo nivel, la trayectoria de Jimmy McGill hacia Saul Goodman es una imprescindible en el “My List”. El atractivo de reencontrarse con Gus Fring, los Pollos Hermanos, Mike Ehrmantraut y el clan Salamanca da nuevo valor a la serie, complementando lo que vendrá con Walter White / Heisenberg. Bob Odenkirk, Jonathan Banks, Rhea Seehorn (Kim Wexler), y Michael McKean (Chuck McGill) entregan momentos de gran brillo actoral. La quinta será la última: una pena.
  • Animals (HBO). Sí, los animalitos hablan e interactúan de modo antropomórfico, pero en esta creación de Phil Matarese y Mike Luciano (quienes hacen buena parte de las voces) no hay nada de Disney. Ratas, palomas, perros, gatos, caballos y otras especies le dan forma a historias por demás ácidas, hasta desesperanzadas; aquí los humanos son apenas apariciones invitadas que dejan a la raza muy mal parada. Los episodios de 26 minutos resultan ideales para cuando hay una “ventanita de ocio” que puede dedicarse al consumo de series. En la tercera y última temporada, estrenada en octubre del año pasado por HBO, el escenario postapocalíptico de una New York en ruinas le da un tono aún más oscuro.