Más unido que nunca, el movimiento feminista brasileño paraliza hoy a su país. A casi un año del asesinato de la activista Marielle Franco y a dos meses de la asunción del ultraderechista Jair Bolsonaro, las mujeres, trans y travestis se dieron cita hoy en todas las ciudades y plazas de brasil. “Además de marchar contra la explotación económica, contra la reformas que intenta imponer la derecha, contra el fascismo y contra la brecha salarial, este 8M es principalmente contra Bolsonaro y por Marielle” reflexionó en conversación con PáginaI12 la feminista y periodista brasileña de MidiaNinja, Dríade Aguiar. La activista brasileña concuerda con la premisa que sostiene el movimiento transnacional: el feminismo es el lugar de batalla contra el neoliberalismo y el fascismo. “Solamente cuando luchamos contra el patriarcado vamos a estar luchando contra el neoliberalismo y el fascismo”, explicó Aguiar. El feminismo brasileño es el que se movilizó con la consigna #Ele Não y denunció la misoginia y el racismo de Bolsonaro. El movimiento feminista, reflexionó Aguiar, convocó a mujeres que nunca habían salido a las calles y que vieron que Bolsonaro significaba un retroceso en sus derechos. “Por eso hoy el feminismo es resistencia”, afirmó Aguiar.

Informe: S. S.