En San Nicolás, al inaugurar la ExpoAgro de este año, Mauricio Macri se regocijó de uno de los pocos lugares en los que todavía puede sentirse local. Elogió a los productores por haber superado “la sequía más fuerte en cincuenta años”. Luego prometió eliminar las retenciones a las exportaciones, “este impuesto a los cuatro pesos que es un mal impuesto, de emergencia”. Y, finalmente, indicó que “hay que ratificar el camino” y optar por este modelo.

“Queremos que nuestros alimentos lleguen al mundo entero. El campo puede generar mucho”, dijo ayer Macri. “Lo que ha hecho el campo es un milagro: se recuperó de la peor sequía en años y se encamina a una cosecha récord”, subrayó. Luego prometió reforzar la seguridad para proteger la cosecha gruesa de los robos, y la apertura de líneas de crédito del BICE para la compra de maquinaria agrícola y camiones.

“Sabemos el momento difícil y duro que estamos viviendo respecto de la restricción financiera, por eso es importante despejar cuanto antes las incertidumbres políticas”, señaló, antes de enfatizar, ya en tono de campaña, que “los argentinos vamos a decir que ratificamos el rumbo”.