Alrededor de las cuatro de la mañana, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner llegó al aeropuerto de Ezeiza proveniente de La Habana, en donde se encontraba acompañando a Florencia, sometida a análisis clínicos y un tratamiento médico diario. Según informó horas antes de emprender su viaje de regreso, la senadora nacional presentará hoy ante la Justicia el diagnóstico realizado en Cuba, que le recomienda a su hija no viajar de regreso al país. La historia clínica revela que ella padece "un trastorno de estrés postraumático", acompañado por otros diagnósticos como "linfedema ligero de miembros inferiores", “síndrome purpúrico”, “polineuropatía sensitiva desmielinizante”, “amenorrea” y “bajo peso corporal”.

"La paciente se encuentra realizándose un estudio integral que aún no ha culminado y tratamiento fisioterapéutico diario. Por todo lo anterior no se recomienda viajar", finaliza el informe firmado los médicos Roberto Castellanos Gutiérrez y Charles Hall Smith, del Centro de Investigaciones Médicas Quirúrgicas (Cimeq) de La Habana.

Cristina Kirchner explicó que decidió dar a conocer la historia clínica de su hija a pedido de la propia Florencia: “Fue ella, en virtud de las mentiras y falsedades publicadas en estos días, quien me pidió que se conozcan públicamente”. La senadora explicó que Florencia “piensa que de este modo terminará el circo de violencia sobre ella y su estado de salud”. CFK agregó: “No sé... La verdad es que me hubiera gustado no tener que hacerlo, pero es tanto el odio y la violencia que ejercen contra su persona, que tal vez tenga razón”.

La ex presidenta detalló que hoy sus representantes presentarán en Tribunales un resumen de la historia clínica de Florencia. “Sabiendo cómo funciona el tándem partido judicial-medios de comunicación, ni bien se presente el certificado en mesa de entradas sólo es una cuestión de tiempo su filtración a los medios y su difusión masiva. Así está hoy la Argentina”, señaló.