Nuevamente, un miembro de las fuerzas de seguridad que estaba de franco mató con su arma reglamentaria a una persona que intentó asaltarla. El hecho ocurrió ayer en la localidad de San Martín, cuando un gendarme que trabajaba como chofer de Uber le disparó un tiro en el pecho a un joven de 19 años que intentó asaltarlo con un arma de juguete.

El gendarme que mató a una persona con su arma reglamentaria mientras estaba fuera de servicio y en momentos en que se desempeñaba como chofer para sumar unos pesos adicionales a su salario tiene 42 años, que es suboficial y que sigue en servicio y sin ninguna medida en su contra.

Según los relatos, todo comenzó en la madrugada de ayer mientras el gendarme manejaba su Renault Sandero negro y aceptó una alerta de la aplicación Uber para hacer un viaje cuyo destino comenzaba en Bouchard y Calle 2, a tres cuadras del barrio conocido como Villa La Rana.

Al llegar, dos jóvenes se le habrían acercado (no está claro si subieron al auto o no), uno de ellos sacó su arma de plástico y le pidió el dinero de la recaudación. Inmediatamente, siempre según la versión policial, el suboficial se resistió, sacó su arma, habría dado la voz de alto, y abrió fuego contra ambos.

El joven, llamado Esteban Alexis Batista, quedó tendido junto al auto, del lado de la puerta del conductor, mientras que el otro salió corriendo. El primero agonizó por varios minutos hasta que murió. Junto a su mano derecha quedó la réplica de pistola.

Minutos después, el supuesto cómplice, también de 19 años, terminó detenido por agentes de la Comisaría de Villa Ballester tras ser alertados por un llamado al 911.

La muerte a manos de un suboficial de Gendarmería se enmarca en un contexto en el cual el gobierno nacional legitima el gatillo fácil.

El caso del suboficial de Gendarmería es investigado por la Unidad Fiscal de Investigación (UFI) 5 del departamento judicial de San Martín, donde el gendarme prestó declaración. El Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires hizo trascender información que indica que el fallecido y su supuesto cómplice tendrían antecedentes de robos ocurridos en la misma zona.