La necesidad es la madre de todas las juntadas. El panorama musical –la escena, el mercado y todas sus aristas– promovió la colectivización de experiencias y proliferación de sellos colectivos, de Laptra a Elefante en la Habitación, de Ringo Discos a Monqui Albino o Desde El Mar. Y el paso siguiente es la intención lógica de mostrar lo hecho: del sello a las fiestas –o de las fiestas combinadas al sello– y de allí al festival, como eslabones de una misma cadena de búsquedas pero amplificada.

Este sábado 11, a 164 kilómetros de capital y 140 de Rosario, en ese punto estratégico y equidistante de esos dos focos culturales híper poblados que es San Pedro, con el río Paraná y la nobleza costeña a favor, las bandas que conforman el sello autogestivo e independiente Chancho Discos –rock, pop, progresivo, indie et al– darán comienzo al primer Festival Ruido Chancho.

Invitados por Madreperla, banda sanpedrina miembro del sello, y con buena recepción del municipio, 14 bandas presentarán sus trabajos en un escenario frente al Paraná. Muchas de ellas, invitadas aún sin ser parte del combo. La idea, explica Fernando Larrosa, tecladista de la banda partícipe Proyecto Da Silva, es agrupar. Además de su grupo y el local, estarán Amor en la Isla, La Teoría del Caos, Viva Marte, KJJJJJJJJJ, Proyecto Quásar, Blizters, Nicolás Aimo, Beirro, Cochecama, Cayen al Duende, Gatos que Ladran y Telesistema.

El aporte de lo colectivo, dice Larrosa, está en la mirada ajena: de alguien que va al lado, en forma paralela, y aporta ideas; además de la difusión mutua y la posibilidad de llegar entre varios a más espacios. “Y también para apoyarnos en las malas, que no son pocas”, ríe.

Hace tiempo dijeron que “la escena musical es la mejor de todos los tiempos”, ¿seguís sosteniéndolo?

–Sí, porque lo que se está generando en la movida independiente, eso que se gesta por abajo y que quizás no sale en los medios masivos, es incomparable: no pasó nunca en el rock argentino. La cantidad de bandas y sellos autogestivos pinta un panorama muy interesante para hoy y el futuro: es resultado, probablemente, de la crisis de la industria. Desde MTV o los sellos, que se fueron por otro lado; y también de una era post Cromañón que obligó a pensar cómo hacer las cosas e involucrarse con cosas en las que antes los músicos no se metían. Quizás es mucho más difícil vivir de esto, aunque antes eran cinco bandas las que salían a flote y el resto seguía marginado. Ahora todos tenemos más o menos las mismas chances, y depende un poco de la creatividad y la resistencia al fracaso.

Lo colectivo, entonces, se ha tornado en una especie de red de contención. Y las posibilidades de Internet alientan la difusión propia. En cuanto a la independencia, explica Larrosa, se trata de no depender de nadie para tomar decisiones: de hacer ruido sin pedir permiso.

* Sábado 11 en Paseo Público Municipal, San Pedro. Desde las 13. Gratis.