Para la próxima Copa América, Brasil impedirá el ingreso de hinchas con antecedentes violentos. La normativa señala que en todos los aeropuertos, puertos y pasos fronterizos terrestres habrá un control férreo con información suministrada por otros países a las autoridades migratorias brasileñas. La medida estará en vigencia hasta el 7 de julio, con la final del torneo que se disputará en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.