El Consejo Constitucional de Francia postergó para el 24 de mayo su pronunciamiento sobre la extradición del represor Mario Sandoval, un ex miembro de Superintendencia de Seguridad Federal que integró el Grupo de Tareas 3.3 de la ESMA durante la dictadura. Desde 2012, cuando el juez federal Sergio Torres pidió su extradición, se pronunciaron en esa línea tribunales de apelaciones de París (2014) y Versalles (2017), fallos confirmados en 2018 por la sala penal del Tribunal de Casación. En agosto pasado el primer ministro francés Edouard Philippe ordenó la extradición de Sandoval, quien presentó un recurso ante el Consejo Constitucional, que ayer postergó su decisión por diez días. Sandoval está acusado por su actuación el 30 de octubre de 1976 en el secuestro de Hernán Abriata, un militante de la JUP desaparecido tras su paso por la ESMA. Ese año, como oficial subinspector de la Policía Federal, estaba destinado en el Departamento de Asuntos Políticos, en el séptimo piso de Moreno 1417, cuatro pisos más arriba del centro clandestino de Superintendencia. De su legajo surge que realizó cursos de instrucción en “lucha antisubversiva”, en los que se enseñaban técnicas de interrogatorio bajo tortura, y que fue “recomendado” en noviembre de 1976 por su actuación en “procedimientos antisubversivos”. En 1984, sobrevivientes de la ESMA declararon ante la Conadep sobre Churrasco como “agente operativo” del GT 3.3. Del mismo año son los testimonios sobre el secuestro de Abriata que mencionan a Sandoval.