Tras una ausencia de dos ediciones, Argentina firmará este lunes su regreso a los Mundiales de fútbol femenino cuando se enfrente, desde las 13, a Japón. El escenario será nada menos que el Parque de los Príncipes de París, Francia, país donde se desarrolla la octava Copa del Mundo de la categoría.

Once años y ocho meses pasaron del último partido de la Selección en este tipo de certámenes: una derrota por 6-1 ante Inglaterra que marcó el final de la participación nacional en China 2007. Aquella vez, Argentina fue eliminada en primera fase tras caer con las alemanas (luego campeonas) por un abultado 11-0, con Japón por 1-0 y, por último, ante las británicas.

Ahora, frente a las asiáticas, las dirigidas por Carlos Borrello tendrán la oportunidad de borrar ese largo recuerdo, aunque no les será nada fácil. Las niponas llegaron a la final en los últimos dos Mundiales: en Alemania 2011 se impusieron a Estados Unidos en los penales; mientras que en Canadá 2015, las norteamericanas se tomaron revancha y las golearon por 5-2. De aquel plantel campeón hace ocho años, cinco jugadoras siguen vigentes en el equipo japonés: las defensoras Aya Sameshima (INAC Leonessa, de la J-League), Rumi Utsugi (Reign FC, de EE.UU.) y la capitana Saki Kumagai (Lyon, de Francia), la mediocampista Mizuho Sakaguchi (Nippon TV Beleza, de la J-League) y la delantera Mana Iwabuchi (Bayern Munich, de Alemania).

En Francia, Argentina comparte el Grupo D, además, con Inglaterra (juegan el viernes 14) y Escocia (miércoles 19), que este domingo se enfrentaron con un triunfo 2-1 de las primeras. Las inglesas, terceras en el ranking mundial de la FIFA, son unas de las favoritas al título junto a Estados Unidos, Alemania y Francia, primera, segunda y cuarta respectivamente en el listado. En este, las argentinas ocupan el puesto número 49, mientras que las japonesas, el séptimo, y las escocesas, el vigésimo.

La clasificación al Mundial no fue nada fácil para Argentina, que terminó tercera en la Copa América (Brasil y Chile ocuparon el primer y segundo puesto y lograron el pasaje directo) y tuvo que disputar el repechaje ante Panamá (4-0 como local y 1-1 de visitante). Tras sumar sólo derrotas en sus dos participaciones mundialistas previas (en Estados Unidos 2003 cayó con Japón por 6-0, con Canadá por 3-0 y con Alemania por 6-1), el objetivo para este regreso a las Copas es claro: pasar la primera fase por primera vez y, si no es posible, sumar por lo menos un triunfo.

La tarea, claro está, no es fácil. Con la profesionalización local como un batalla recién ganada este año y todavía no implementada, Argentina está un paso atrás de las grandes potencias . Por eso, Borrello armó un plantel con amplia presencia de jugadoras que actúan en el exterior, principalmente en la poderosa liga de España, destacándose Estefanía Banini, capitana de la Selección y mediocampista de Levante. Además, en ataque, estará Soledad Jaimes, recientemente campeona con Olympique Lyon de Francia de la Champions League. Por el lado local, la presencia de Mariana Larroquette, goleadora de los últimos dos torneos con UAI Urquiza, es una de las más resonantes. Esa fusión entre roce europeo y espíritu amateur puede ser el elemento que haga a esta Argentina, algo diferente del resto en Francia.