El candidato de Usandizaga para Rosario dijo que "hemos tenido mucha suerte con las buenas administraciones" dictatoriales en la ciudad.
El candidato a intendente del usandizaguismo René Balestra se mostró como un ferviente defensor de los gobiernos dictatoriales que tuvo la ciudad de Rosario, poniéndolos en nivel de igualdad con las gestiones democráticas posteriores a 1983. "Nosotros hemos tenido mucha suerte con los gobiernos constitucionales y con los gobiernos de facto, en el sentido de que ha habido algunos intendentes que han hecho una buena administración", dijo ayer en declaraciones al programa "De tarde en tarde" de Radio Dos. No satisfecho con esa comparación, el profesor de Derecho Constitucional de la UNR enumeró "no solamente a Alberto (Natale), pienso también en (Pablo) Benetti Aprosio, en el capitán (Augusto Félix) Cristiani, en fin... gente que ha hecho una administración correcta".
Balestra tuvo un debut singular como postulante al Palacio de los Leones por la línea interna Convergencia de la Unión Cívica Radical. En sus primeras declaraciones con el traje de candidato, el actual diputado nacional por Santa Fe defendió las gestiones de diversos intendentes nombrados por gobierno ilegítimos.
Primero citó a Pablo Benetti Aprosio, que asumió durante la autodenominada Revolución Argentina que abrió en 1966 el general Juan Carlos Onganía. Luego mencionó al capitán de navío Augusto Félix Cristiani, que ocupó el sillón principal del Palacio de los Leones a partir de la dictadura militar instaurada en 1976. Cristiani es recordado en Rosario por dos hechos singulares. Uno permanece en el imaginario popular y el paso del tiempo no logró repararlo: el delegado de la Armada comandada entonces por el almirante Emilio Eduardo Massera ordenó talar las antiguas palmeras que hacían de 27 de Febrero un bulevar señorial de características similares a Oroño. El pedido surgió en su momento de parte de empresas transportistas con el argumento de que los árboles dificultaban el tránsito de los camiones con rumbo al puerto. Sin mayores consultas, el delegado militar transformó el bulevar en una avenida que desde entonces no volvió a recuperar el verde que la caracterizó durante décadas.
Otra decisión de Cristiani privó a los rosarinos durante 20 años de la posibilidad de decidir el destino de los terrenos de Puerto Norte. Favoreciendo intereses particulares, el 26 de agosto de 1976 el entonces intendente concedió la autorización para la actividad portuaria de la firma Genaro García por un plazo de 20 años. Cumplido ese término, en 1996 el gobierno de Hermes Binner ordenó la clausura de la planta -que entre otros perjuicios fue causante de una seria contaminación en barrio Malvinas-, que luego de largos trámites judiciales recién se pudo concretar el 17 de setiembre de 1998.
Balestra fue aun más lejos al señalar que los gobiernos locales de facto "no se conoce que se hayan convertido, como otras municipalidades, en latrocinio. Recuerden lo que pasó con aquel intendente de Santa Fe que terminó preso", en referencia al justicialista Carlos Aurelio Martínez.
Al referirse a las administraciones surgidas democráticamente a partir de 1983, Balestra destacó a "Usandizaga y el primer gobierno de Cavallero, porque después los factores políticos coyunturales lo enajenaron y lo sacaron un poco de quicio" y también elogió a la gestión de Binner que hace "un buen gobierno, pero todo puede ser mejorado".
Respecto a su programa de gobierno como candidato radical, señaló que
"no creo que exista una fórmula matemática, porque uno de los errores es que la política puede ser diagramada con tiralíneas y compás. Una de las grandes catástrofes que ha sido consecuencia de gobiernos dictatoriales es lo que se denominó `determinismo histórico': uno tenía una fórmula y la sociedad tenía que entrar en la fórmula que uno había elaborado".