El Colectivo de Trabajadores de las Orquestas y Coros del Bicentenario informó que “peligra gravemente” la continuidad de las orquestas y coros de la Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS), situación que afecta a más de 170 chicos y jóvenes del partido de San Miguel. Para los docentes que integran el colectivo, se trata de “una muestra más del perverso y sistemático vaciamiento” que vienen sufriendo este programa y “la educación en general”.

El riesgo es que dos orquestas infanto-juveniles, un coro de niños y otro de jóvenes no puedan continuar este año. Estas agrupaciones pertenecen al programa nacional de Orquestas y Coros para el Bicentenario, que desde el cambio de gobierno peligra en general, según han denunciado en varias oportunidades los maestros. Por distintos motivos, fundamentalmente por demoras en el pago de sueldos o sueldos no pagados. Este programa responde a un modelo de enseñanza musical que lleva treinta años en América latina y constituye una apuesta fuerte a la inclusión social y a la educación, con epicentro en los barrios más castigados de casi todas las provincias.

Según explicó el colectivo en un comunicado difundido el fin de semana, los coros y orquestas de la UNGS, al igual que los de la Universidad Nacional de Avellaneda, fueron los únicos que durante 2016 no fueron provincializados. Es decir que continuaron dependiendo directamente del Ministerio de Educación de la Nación. “El año pasado, mediante una tardía resolución, este ministerio se comprometió a garantizar la continuidad de los coros y orquestas, a sostener el financiamiento”, relató el colectivo. “Sin embargo, la real continuidad sólo fue gracias a los docentes, pibes, pibas y sus familias, que sostuvieron los espacios y las clases.” Por otro lado, la UNGS “asumió el compromiso de abonar los sueldos”. Desde mayo no se reciben los fondos nacionales para tal fin.

“Fueron innumerables las gestiones realizadas durante todo 2016 hasta el presente por el referente de las orquestas y coros de la UNGS, y diferentes funcionarios de la universidad, para un real compromiso de continuidad en 2017, pero nunca hubo una respuesta clara que diera solución concreta al sostenimiento de estos espacios que brindan igualdad de posibilidades de acceso a la educación artística-musical y la cultura”, protestaron los maestros. Desde enero en adelante “la perversa respuesta fue la del silencio más absoluto”, aseguraron. Responsabilizan por esta situación al ministro de Educación, Esteban Bullrich, y al coordinador nacional de las Orquestas y Coros para el Bicentenario, Eduardo Ihidoype: “por vulnerar el derecho que tienen nuestras niñas, niños y jóvenes de acceso a la educación pública y a la cultura”.