El intendente de Mar del Plata, Carlos Arroyo, se sumó a la polémica por el Servicio Cívico Voluntario en Valores que impulsa Patricia Bullrich a través de la Gendarmería. El jefe comunal no solamente respaldó la controvertida idea de la ministra de Seguridad, sino que se mostró a favor del servicio militar, cuya eliminación consideró “un verdadero desastre” y afirmó que lo haría extensivo a “mujeres y discapacitados”.

Arroyo, quien fue funcionario de la intendencia en la dictadura y llegó al gobierno comunal por la boleta de Cambiemos hace cuatro años, dijo que es “excelente” la propuesta que contempla que jóvenes de 16 a 20 años queden bajo la guarda de Gendarmería. “Siempre consideré como un verdadero desastre para el país la decisión motivada por un pésimo general, que fue (Martín) Balza, de desactivar el servicio militar”, afirmó Arroyo acerca de la medida dispuesta por el ex presidente Carlos Menem hace 25 años.

En aquel entonces, Menem decretó el fin del servicio militar obligatorio, una institución casi centenaria, a raíz del crimen del conscripto Omar Carrasco en un regimiento de la provincia de Neuquén, que se transformó en un hito de una larga cadena de abusos.

“Hay una enorme juventud que no tiene nada que hacer, no tiene un oficio; andan dando vueltas en vez de estar aprendiendo a cuidar la soberanía argentina, están en plazas drogándose o tomando cerveza”, dijo ahora Arroyo para justificar la iniciativa de Bullrich.

“Estoy totalmente a favor del servicio militar. Lo digo para todo el mundo, hasta para las mujeres. Y además lo haría también para los discapacitados, pero no para ponerles un arma en la mano... cambiaría el sentido”, agregó el intendente marplatense. “Lo haría como una escuela de oficios, de capacitación de vida, que es otra cosa totalmente distinta, porque aprenderían a tener orden, a tener disciplina, en muchos casos a ser higiénicos”, agregó.

En el mismo acto Arroyo subestimó el rol de las escuelas en la franja etaria para la que se pensó la nueva colimba y consideró que las escuelas “no están dando esas herramientas”, en relación al orden y a la disciplina que pregona. “Yo soy docente, lo he vivido, aunque no era el caso de mi escuela”, precisó. Y dijo que tuvo “alumnos que tenían 20 años y no sabían quién había sido San Martín o Belgrano”.

“Si usted incluye a los discapacitados les daría un motivo para vivir, para hacer cosas un oficio. Creo que hay que ser inclusivos”, siguió el jefe comunal, quien adelantó que antes que enseñar a usar armas, instruiría a los colimbas en cosas como “levantarse a la misma hora, aprender a comer, a bañarse todos los días, a lavarse la ropa llegado el caso, a hacer una cama”. Adujo que en su época docente tuvo también alumnos a los que le daban una pastilla de jabón, “la olían y la guardaban en el armario porque no sabían que era para bañarse”.