Con gestos y ademanes amenazantes hacia periodistas, ayer comenzó a ser juzgado el excampeón mundial de boxeo, Carlos Baldomir, acusado de delitos contra la integridad sexual de su hija. La Fiscalía de la ciudad de Santa Fe pidió la pena de 20 años de prisión por hechos de "abuso sexual con acceso carnal calificado, abuso sexual gravemente ultrajante y promoción a la corrupción de menores", expresaron los fiscales Alejandra Del Río Ayala y Federico Grimberg. La semana que viene se conocerá la sentencia.

Baldomir esta preso en la cárcel de Las Flores y fue trasladado ayer al juicio que preside el tribunal compuesto por Pablo Busaniche, Rodolfo Mingarini y Susana Luna, en los Tribunales de Santa Fe. El acusado de 48 años entró esposado a la sala de audiencias y antes de sentarse se giró hacia un grupo de periodistas y al resto de los presentes para hacerles fuck you, con la mano en alto. Sin quitarles la mirada, mientras era fotografiado y filmado, hizo otros gestos que fueron considerados amenazantes e intimidantes, como mostrarles sus puños. Ante ello, la Asociación de Prensa de Santa Fe emitió un comunicado de repudio por esa actitud y se manifestaron en defensa del ejercicio de la libre tarea.

La causa en su contra se inició en octubre de 2016 con la denuncia de su ex esposa y madre de la niña ante el Centro de Orientación a la Víctima de Violencia Familiar y Sexual. La detención se ordenó cuando Baldomir residía en la ciudad de Junín (Buenos Aires).

Ayer, una vez empezado el debate, Fiscalía planteó que "los ilícitos comenzaron cuando la víctima estaba en edad escolar (entre 8  y 9 años) y se reiteraron en múltiples oportunidades". Del Río Ayala señaló que "algunas de las agresiones sexuales fueron perpetradas en el domicilio familiar que compartían la víctima y el acusado, y en el que también vivían los hermanos de la niña y la madre, que era pareja del acusado". Por su parte, Grimberg manifestó que "también abusó de su hija cuando se trasladaba en automóvil con ella". Pero, los abusos "no solo fueron cometidos en la ciudad de Santa Fe, sino también en una vivienda de Junín donde el acusado residía temporalmente, y en ocasiones en que la víctima concurrió a visitarlo", indicaron.

Según la acusación, puntualmente "en los veranos de 2012 y 2013, durante las visitas, el acusado aprovechaba los momentos en los que compartía la cama con la niña o cuando el resto de la familia estaba durmiendo para perpetrar las agresiones sexuales". Al mismo tiempo, fue acusado de "abusar de su hija en febrero de 2014, en una ocasión en la que junto a otros familiares concurrieron a una cena en la localidad de Sauce Viejo", explicó Grimberg. "Cuando regresaban en automóvil, y mientras conducía el hijo del acusado, este se ubicó en el asiento trasero junto a la niña y cometió los ilícitos".

La denunciante y madre de la víctima se constituyó como querellante y cuenta con la representación de los abogados Alejandro Otte y Néstor Oroño. En tanto, según se indicó, la lectura del veredicto está prevista para el miércoles 31.