María Paula Filipelli estudió bellas artes y hace 6 años descubrió el veganismo. Filipelli participó en diferentes acciones de organizaciones veganas, pero actualmente utiliza el arte para mensajes en contra de la explotación animal y, además colaborar con las agrupaciones.

“Tengo 35 años y soy vegetariana hace más de 10” contó a Página|12 la artista y tatuadora que está detrás de las ilustraciones de la cuenta de Instagram “Hola Airam”. Filipelli descubrió el veganismo cuando conoció a un amigo. “En ese momento no había redes sociales, no tenías tanta información y no había escuchado hablar del veganismo. El debía ser la segunda persona vegana que yo conocía”, recordó.

Filipelli se hizo vegetariana después de ver en la televisión un informe sobre vacas, aunque no recuerda bien qué mostraba. “Decidí que quería dejar de comer vacas. Yo rescataba perros y gatos. Había algo interno en mí que me decía que esas vacas sentían de la misma forma que un perro. Como que hice la conexión”, afirmó.

Siguió consumiendo alimentos derivados de los animales hasta que conoció a su amigo. En ese momento, Filipelli sintió que “con ser vegetariana no alcanzaba”. “Él me explicó lo que implicaba la industria de los lácteos y eso fue suficiente para que decidiera que no quería consumirlos más”, sostuvo.

Así es que Filipelli comenzó su transición hacia el veganismo. En un inicio, seguía una dieta vegana dentro de su casa y, cuando salía, consumía comidas vegetarianas. Hoy, destacó, hay una oferta mayor de menúes y productos veganos disponibles en el mercado. Sin embargo, advirtió la artista, “muchas veces la etiqueta dice vegano, pero cuando te fijás lo que tiene en la etiqueta es una porquería que no tiene nada de nutritivo y son puros químicos”.

Filipelli aclaró que hay distintas formas de interpretar el veganismo, pero que personalmente elige “llevar un modo de vida más sustentable en todo sentido y que genere el menor daño posible en todos los aspectos”. “Yo como alimentos orgánicos, cuando voy a la dietética llevo un taper, no uso descartables, separo los materiales reciclables, hago compost, trato de preparar hasta mis propios productos de tocador”, afirmó.

“Mi activismo yo lo llamo activismo ilustrado”, describió la artista. Filipelli realiza tatuajes y con “Hola Airam” vende postales, ilustraciones y bolsas de tela con dibujos de animales que llaman al cuidado del medioambiente. “Yo hago dibujos gratuitos para que las organizaciones de distintos lugares del mundo las utilicen y hagan productos para que logren juntar fondos. Esa es mi forma de colaborar”.

Informe: Ludmila Ferrer.