15 de junio

Sábado, 9:30: me despiertan los gritos insultantes del niño del 12 al pasar por mi puerta. Parece que solamente se pone agresivo cuando está con sus padres, y hoy se los oía a ellos también. Ya anoche andaban medio alborotados y además hoy se cumplen 4 semanas de la amenaza de su no muy tierna madre, y 4 semanas son un ciclo. Logro mantener la moral alta en el nivel consciente pero el cuerpo expresa la queja regalándome un estruendoso ataque de pánico, con todos los chiches: sensación de infarto, ahogo, tos imparable, etcétera. Tomo una firme decisión de salir, de ir a comprar facturas, de inmediato. Ni siquiera pierdo tiempo buscando dinero extra y llevo lo que tengo a mano. Me sorprendo yo misma de la prisa y de la firmeza con que decido algo tan trivial.

Pero ese apuro me dio un timing providencial. Porque ni bien estoy saliendo de la panadería, me encuentro con la diariera del barrio. Hace mucho que no nos vemos y empieza a contarme los problemas nuevos que tiene. ¡Son muy parecidos a los míos! Se los cuento. "Ah, te están haciendo la psicológica", opina. El maltrato que ella recibe y el objetivo que ambas sospechamos son los mismos: quebrarla, encaminarla hacia una institucionalización crónica con la intención de quitarle su casa y el goce de la vida, que ella ejerce en sus ratos libres a través de su arte, su poesía y su jardín lleno de plantas. Lo peor de estas sospechas es que al verbalizarlas nos hundimos más y más en el estigma de demencia que la sociedad nos asigna a las mujeres solas de más de 50 años que, oh, casualidad, disfrutamos de una propiedad codiciada.

 

LEY DE PROTECCION INTEGRAL A LAS MUJERES

Ley 26.485

Ley de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales

Sancionada: Marzo 11 de 2009.

Promulgada de Hecho: Abril 1 de 2009.

ARTÍCULO 5º - Tipos. "Quedan especialmente comprendidos en la definición del artículo precedente, los siguientes tipos de violencia contra la mujer:

2.- Psicológica: La que causa daño emocional y disminución de la autoestima o perjudica y perturba el pleno desarrollo personal o que busca degradar o controlar sus acciones, comportamientos, creencias y decisiones, mediante amenaza, acoso, hostigamiento, restricción, humillación, deshonra, descrédito, manipulación aislamiento. Incluye también la culpabilización, vigilancia constante, exigencia de obediencia y sumisión, coerción verbal, persecución, insulto, indiferencia, abandono, celos excesivos, chantaje, ridiculización, explotación y limitación del derecho de circulación o cualquier otro medio que cause perjuicio a su salud psicológica y a la autodeterminación".

 

Esta sociedad no respeta la dignidad de las mujeres que hemos pasado la edad reproductiva. No nos reconocen el derecho a disfrutar de la vida o de una propiedad aunque nos pertenezca. Suponen que somos un desecho. Que nuestro lugar tiene que ser una cama en un geriátrico o en un manicomio, o una vereda en la calle. No nos reconocen el derecho a vivir una vida libre de violencia.

La sociedad toda, no sólo cónyuges sino hijos y vecinos, se arroga el poder de criticar cómo nos vestimos y cómo y con quién (o sin quién) vivimos. Personas comunes y corrientes sin título habilitante alguno en medicina especializada y sin la menor autoridad legal sobre nuestras vidas, hijos ingratos y simples vecinos, se arrogan el poder de amenazarnos con internaciones innecesarias, decidir sobre nuestra salud mental y "diagnosticarnos" sufrimientos psíquicos que no padecemos, y que ellos incluso buscan provocar en un círculo vicioso perverso, desestabilizándonos emocionalmente mediante el maltrato, con el fin de privarnos de libertad y propiedad. Parecería una "locura" cultivar un jardincito o tener una mascota mimada o usar plantas medicinales o tener una fe que no sea la católica, o una vida social que no sea la familiar, y todo eso casi sin salir de casa.

¡Y si tuviéramos una vida sexual o saliéramos de joda, a bailar, qué escándalo nos harían! ¿Y si se nos ocurriera practicar algún deporte? ¿O estudiar? Vivir se nos condena, como si fuera un derroche. Es un "control" social mortificante. Es una nueva caza de "brujas". Las mujeres que pasamos la edad reproductiva somos socialmente vulnerables aunque no lo parezcamos. Aunque nuestra resiliencia, humilde sabiduría y vitalidad nos hagan parecer todopoderosas y que vamos a resolverlo todo con un pase mágico, la vida no es una película de Harry Potter.

Es preciso que nos organicemos políticamente, ya mismo. Sólo nosotras podremos defendernos. Y sólo unidas podremos hacerlo. Siempre dije en broma que merecemos ser una franja más en la bandera de la diversidad.

Ahora lo digo en serio.