Un extraño descubrimiento encendió la alarmas en la Unidad Penal de Mujeres de Paraná, cárcel en la que está recluida Nahír Galarza, la joven entrerriana presa con prisión perpetua por haber asesinado de dos balazos a Fernando Pastorizzo. Dos días después de que la Cámara de Casación Penal confirmara la sentencia en primera instancia por “homicidio culposo”, personal penitenciario encontró un muñeco de tamaño real, vestido con un pantalón y una campera con capucha en el interior de su celda.

Hasta el momento se desconocen los propósitos y circunstancias en las que fue armado el muñeco. La Justicia abrió un sumario que intenta determinar si planeaba fugarse el día de las PASO o si sólo se trataba de una broma. La principal hipótesis apunta a que iba a ser utilizado por la joven como instrumento de distracción para escapar de la cárcel durante las elecciones del domingo.

El 14 de agosto la Cámara resolvió mantener firme la condena en primera instancia por unanimidad. En el fallo de 44 páginas, la Cámara sostuvo que el fallo previo del tribunal entrerriano  “ha sido absolutamente clara en establecer que entre imputada (Galarza) y víctima (Pastorizzo) existía una relación de pareja en los términos de la ley penal”. El vínculo había sido negado por la defensa de la joven entrerriana en su estrategia judicial.