El pasado 8 de agosto, el mismo día que las redes sociales explotaron con el jingle a favor de Axel Kicillof que reedita la canción de presentación de Pokémon, Axel Fiks subió a YouTube su propio single inspirado en el candidato a gobernador por la provincia de Buenos Aires. “De Axel para Axel”, cierra la introducción del tema en clave de rap, cuyos primeros segundos plantean el escepticismo político del autor. “No sé cómo se me ocurrió”, asegura el músico de 21 años. “Calculo que quise hablar de él porque se llama igual que yo. Me llevó algunas horas hacerlo porque nunca tuve una opinión política estricta, así que no quería decir boludeces. Me gustó, lo grabé y quedó re bien. Apenas lo subí, se difundió un montón. Pronto estará en Spotify.” No obstante la casualidad, mientras el nombre del actual diputado por la capital argentina está relacionado con el origen judío de su familia, el beatmaker y cantautor se lo debe al líder de Guns N’ Roses. “Mi vieja es muy melómana. De chiquito escuchaba ese glam más metalero, el de Poison o Skid Row.”

 

Aún cuando Fiks subraya que su búsqueda sonora la hizo solo, la influencia de su madre pesa en su incipiente obra: no sólo le muestra sus temas una vez acabados sino que fue ella quien tuvo el tino de ver su potencial. Amén de regalarle su primera guitarra, lo inscribió en la Escuela de Música Juan Pedro Esnaola, de donde provienen algunos de los artistas que revolucionan actualmente la escena musical argentina, entre los que destaca Ca7riel. “Yo estaba en primero y Cato, que ya era ídolo, en cuarto”, recuerda. “En el Esnaola se compartía la energía de que el más grande ayudaba al más chiquito, y viceversa. Cursé hasta tercero porque mis amigos se comenzaron a ir. De ahí surgió toda la gente con la que toco hoy.” Aunque al principio su mundo pasaba por Villa Luro, su barrio de origen, donde fue vecino de los Ruiz Díaz. “Cuando jugaba a la pelota y caía en su casa, le tocaba el timbre a Fernando para que me la devolviera. No había mucho futuro musical: si seguía allí capaz sólo me hubiera dedicado al fútbol, a hacer quilombo y a drogarme.”

Como es un nerd confeso al que le gusta leer biografías de músicos “para ver quién influyó a quién”, Fiks encontró sus arquetipos en Skrillex y Jeff Buckley. Al primero se lo topó a los 12 años, en medio del auge del dubstep a la manera yanqui, lo que lo empujó hasta el Fruity Loops para manufacturar sus beats iniciales. A Buckley, que hace un cuarto de siglo le partió el corazón a la progenie grunge con su disco Grace, lo descubrió a los 15: “Este tipo hacía algo distinto, y le robé unos acordes”, reconoce el artífice que tuvo en la batería y el teclado sus instrumentos germinales. “Ahí hice una canción, Vino, que está en el primer material que subí a Spotify, el EP Jaja Lol (2018). Pero la influencia y mi búsqueda van cambiando con el tiempo”, dice Fiks, quien dio muestras de eso meses después, en su álbum debut. “Para el disco Idilio me influyeron J Dilla, D’Angelo y Prince, toda la parte más soul. Admiro el sonido afroamericano. Amo tocar con ocho instrumentos, batería con swing y gospel. Sin embargo, soy blanco y quizás no pueda expresar ese estilo tan bien.”

 

Idilio es una colección de chispazos de pop, indie, trap, soul y hasta un homenaje a Julio Cortázar de matiz R&B. Son 13 canciones, algo zarpado para esta época, considerando que la mayoría de los discos nacionales que se suben son de 7. “Los temas difieren mucho entre sí en cuanto a género”, describe Fiks acerca de un repertorio que versa, a partir de su impulsividad ariana, acerca del amor, del desamor, del hedonismo y de la idealización. “Lo que sí hay en común son los samples, amo ser beatmaker, como Madlib y DJ Premier. Era más que nada un rejunte de lo que venía haciendo, no fue muy buscado. Después de eso vino más la parte de planificación. Ese disco sirvió para mostrarme como artista. Algunas canciones las tenía hechas, mientras que otras las hice entre junio y setiembre, en una etapa precisa de mi vida: estaba en el mismo estado mental y lo aproveché. Me gusta eso de un disco: que puedas contar lo que te pasó cuando lo hiciste.”

Aparte de Fellinesca, el novel artista puso en circulación este año el single Chica Acuario, en el que participa Goyo Degano, cantante de Bandalos Chinos. “Cuando me empezó a seguir por Instagram, le dije que me encantaba lo que hace y le mandé ese tema a ver si le interesaba. Le gustó y fuimos al estudio a grabarlo”, evoca Fiks. “Nos queremos mucho”, señala, y también comenta que Paco Amoroso le cedió unas bases para el todavía inédito Coca Cola. “Lo conocí a través de Cato, pero también es el ex de una de mis mejores amigas. Apenas se estaban juntando a tocar, hicimos canciones y bases, y así nació Coca Cola. Un día Paco fue a las sesiones de BZRP (Bizarrap), le faltaba una base y me preguntó si podía usarla. Y funcionó re bien.”

Con esa palanca, el tocayo de Kicillof se tornó en uno de los hallazgos más exquisitos y versátiles de la escena local, lo que está listo para confirmar con el disco de “trap más basura” que prepara para fines de este año. “No pensaba llegar a los oídos de todos, sólo esperaba mostrar mi música. Ahora me caga un poquito. Lo importante es no perder la libertad de hacer lo que quieras y como quiera.”

* Axel Fiks tocará este sábado 24 de agosto en el Periferia //Music N. Art Experience, en el Club Cultural Matienzo, Pringles 1249. El evento dará puerta a las 17.