Según el Servicio de Información del Concejo hay un total de 789 proyectos que en su carátula tienen una temática de género, de ese total 301 han sido presentados a partir del 2015. Esto significa que casi el 40% de todos los proyectos presentados responde sólo a 4 años y medio, mientras que el resto fue presentado a lo largo de 28 años, ya que según el sistema del Concejo el primer proyecto que utiliza la palabra "mujer" en su carátula aparece en 1987, 4 años después de la vuelta de la democracia.

Ese total se compone principalmente de proyectos que llevan la palabra "mujer" en su título, son 522 de ellos, mientras que la palabra género no fue utilizada para caratular un pliego hasta el año 2007, lo que los deja en 136.

La concejala Norma López entiende que "el Concejo tiene una renovación, generacional, con la incorporación de más miradas de mujeres feministas".

Todas las presentaciones han ido más en sintonía con el reclamo y la movilización del colectivo de mujeres, y no, de forma exclusivamente directa, en base al porcentaje de mujeres que componen el Concejo, ya que en el período del 1999 a 2007 la proporción era de 70% - 30% en promedio, y la mayoría de los proyectos se presentaron de forma posterior a esos años.

"El Concejo es la caja de resonancia de todos los problemas que tenga la ciudad, para nosotros eso es lo importante, porque acompañamos acciones que tienen que ver con la calidad de vida de nuestras mujeres" sostiene López. El Concejo parece haberse comportado como una caja de resonancia, ya que el 2007 además de ser el año en que se empieza a utilizar la etiqueta de "género", también es el año en el que a raíz del femicidio por parte del Estado de Ana María Acevedo surge un cambio en el protocolo para la atención de los casos de embarazos no deseados, allí Rosario avanza en organizar una guía para atender a mujeres que necesitan atención para casos de abortos no punibles.

Algo que da cuenta de la influencia que ejerce el movimiento de mujeres en la dinámica del Concejo es el surgimiento de la palabra femicidio como carátula de proyectos. Se usó recién por primera vez en 2011, un año marcado por la aprobación de la ley de la identidad de género. Un proceso que tendría su peso al año siguiente. El 2012 fue uno de los tres años con mayor cantidad de proyectos de género presentados en el Concejo Municipal, 73 iniciativas, y con la incorporación del "femicidio" como agravante a nivel nacional.

En el período 1999 - 2007 la proporción porcentual era de 70-30, y la mayoría de los proyectos se presentaron después de esos años. 

En sintonía con lo sucedía en la sociedad, a partir del 2015 se genera un nivel de apropiación mayor por parte de quienes integran el Concejo, ya que, en años anteriores algunos de los proyectos más importantes en temática de género eran presentados por organizaciones de la sociedad civil sin representación en una banca. Luego de 2015, mismo año en que tiene su surgimiento el Ni Una Menos, casi no hubo proyectos de género que fueran presentados por concejalas. Además, ese año icónico fue también el que tuvo mayor cantidad de presentaciones con la palabra "mujer" en su título.

El otro año que rompió récord en la totalidad de presentaciones fue el 2018, que coincide en el alto grado de inserción de las problemáticas de género y de las mujeres en la agenda política, representadas en las masivas movilizaciones en el Congreso de la Nación.

Sobre esto, Norma López analizó "todo eso ha influido en el Concejo Municipal de tal modo que a veces no teníamos todos los votos, porque había posturas que tenían que ver con las posiciones religiosas de varones, que si no teníamos los votos de ellos no salían, así que nos dimos una estrategia para enfrentar esa situación, pero mucho más tuvo que ver con el empoderamiento de las mujeres, esto de que el movimiento de mujeres no sea partidario nos daba lugar a generar acuerdos legislativos, entonces algunos de estos varones se levantaban, otros se abstenían, así logramos vincular la guía de atención ante la interrupción legal del embarazo de Rosario con la nacional".

Este aumento en discusión de género fue muy marcado cuantitativamente hacia las mujeres, pero no sucedió del mismo modo hacia las otras identidades de género, estas últimas quedaron un poco rezagadas, ya que el total de carátulas asociadas a quienes se nuclean a la totalidad del movimiento LGTTBIQ son alrededor de 90.

Sobre la inclusión de las problemáticas LGTB Fernando Rey, integrante de la Coordinadora del Orgullo, explicó: "Esto fue cambiando bastante en la última década a partir de la transformación cultural y política que comenzamos a recorrer gracias a la persistencia del activismo LGTB, y que se expresó en la creación desde el Concejo de las primeras políticas públicas municipales de diversidad, así como en todo el país, con el debate de las leyes de Matrimonio Igualitario e Identidad de Género entre 2010 y 2012, fue un gran parteaguas en la ampliación del activismo y la visibilización de nuestra colectivo, que en Rosario se consolidó con el surgimiento de la Coordinadora Orgullo".

Para graficar la situación, la palabra "gay" aparece tan sólo 10 veces como título de proyectos, y en cuatro se refiere a nombres propios, es decir, que sólo hay registrados un total de 6 pliegos referidos centralmente a problemáticas de personas gay.

 

Sobre el porvenir de este proceso, tanto López como Rey coinciden en que lo más importante es que el movimiento feminista siga dando lucha contra el patriarcado, buscando una sociedad más justa.