La AFIP obligará a comercios y prestadores de servicios a consumidores finales a aceptar pagos con tarjeta de débito. La entidad recaudadora lanzó un cronograma para la implementación de POS, con algunos grupos que deberán cumplir la reglamentación desde abril y otros que tendrán tiempo para adaptarse hasta marzo de 2018. El organismo a cargo de Alberto Abad lanzó una serie de beneficios para estimular la incorporación del aparato para cobrar con la tarjeta y pretenden que en el segundo trimestre del próximo año se sumen alrededor de 200 mil nuevos POS. En la actualidad funcionan alrededor de 500 mil POS en todo el país. 

  “La medida busca hacer cumplir una Ley que viene desde 2001 y fue actualizada a mitad del año pasado. Va a permitir colaborar para que, por ejemplo, cada vez más jubilados, pensionados y beneficiarios de asignaciones puedan pagar con la tarjeta de débito y tener descuentos con el IVA”, dijo Abad. Afirmó que la AFIP dialogó con las distintas cámaras sectoriales como la CAC, CAME y los supermercados chinos para elaborar el plan de incorporación del POS y los empresarios, en todos los casos, mostraron buena predisposición. 

  La resolución, que se publicará esta semana en el Boletín Oficial, indica que a partir del 30 de abril todos los comercios mayoristas y minoristas, hoteles y restaurante con facturación mayor a 4 millones de pesos en el período fiscal 2015 deberán contar con el sistema para cobrar con tarjeta. Los que facturen entre 1 y 4 millones tendrán tiempo hasta mayo y los de menos de 1millón podrán incorporarlo hasta junio. 

  Los profesionales, centros de salud, de cultura, deportes y de entretenimientos tendrán que usar el POS a partir de julio en los casos que la facturación haya superado los 4 millones, al tiempo que agostó será la fecha para los de facturación entre 1 y 4 millones y a partir de septiembre para los de menos de un millón. En el resto de las actividades, los plazos serán octubre, noviembre, diciembre, según la facturación. En lo que refiere a los monotributistas, las categorías de la A hasta la E podrán incorporar el POS hasta marzo de 2018, pero las categorías más altas (de la F a la K) deberán hacerlo en forma obligatoria a partir de diciembre de este año.

  En la entidad recaudadora anunciaron una serie de incentivos para impulsar la adquisición del sistema que habilita a cobrar con tarjeta. Por caso, los monotributistas que instalen el servicio no tendrán costo por el alquiler del dispositivo por dos años. En tanto, los inscriptos en el IVA que instalen POS para cobrar con tarjeta de débito tendrán bonificaciones en el costo por alquiler del dispositivo, descuentos del 50 por ciento hasta por seis meses, o gratuidad de hasta 2 años, según el proveedor. 

  Además, la AFIP disminuirá el 50 por ciento las retenciones del IVA y Ganancias en todas las operaciones con tarjeta de débito para los comercios, sin importar el tamaño. Esto implica que las grandes cadenas de supermercados, donde más operaciones con tarjeta se realizan, van a poder aprovechar una parte de recursos que hoy le adelantaban al organismo recaudador para generan negocios financieros con Lebacs o otros títulos. Los comercios de proximidad, en cambio, no tienen la costumbre ni los gerentes necesarios para aprovecharse de esta liquidez, mientras que la mayoría de sus clientes acostumbra a manejarse en efectivo. Esto implica que, al menos en el corto plazo, los hipermercados podrán aumentar el margen de beneficios, mientras que comercios pequeños no tendrán un impacto significativo del beneficio impositivo, lo cual potencia aún más la concentración en el segmento de ventas minoristas.