Un hombre fue asesinado de un balazo por una de las ocho personas que lo persiguieron en la localidad de Villa Ballester, después de confundirlo con un ladrón que días atrás había intentado entrar a robar a la casa de una de ellas. La víctima, Jonatan Ezequiel Sagardoy (32), casado y con una hija, trabajaba desde hacía diez años en el sector de carpintería de la cadena de venta de artículos para la construcción y el hogar "Easy", en la localidad de San Martín. Si bien el presunto autor del disparo se entregó en la comisaría 9ª y quedó aprehendido, luego de que un integrante del grupo agresor aportara los datos, el cuñado de la víctima, Oscar Olivieri, dijo que "queremos a todos presos. Todos fueron responsables de este asesinato".

El hecho ocurrió la madrugada del sábado pasado, cuando Sagardoy llegaba a en su camioneta Peugeot Partner gris a la casa de un amigo en la intersección de las calles Montevideo y San Pedro, en el partido de San Martín.

Según los testigos -dos amigos de la víctima, uno de los cuales estaba en el mismo vehículo que Sagardoy, y otro que estaba detenido en otro auto-, ni bien se detuvo en ese lugar, lo rodearon cuatro vehículos que lo venían siguiendo: una camioneta Renault Master blanca, otra Peugeot Partner, un Fiat Palio y una motocicleta.

"Eran ocho los tipos que lo venían persiguiendo. Había uno en la Master, tres en el Palio, dos en la Partner y dos en la moto. Dos se bajaron y fueron a increparlo. El que tenía el arma se acercó por el lado del acompañante de la camioneta de Jony, que tenía la ventanilla baja, y sin mediar palabra le pegó un tiro que le ingresó por la axila derecha", dijo Olivieri.

Según detalló, en ese momento su cuñado aceleró y el tirador efectuó un segundo disparo que entró por la luneta trasera e hirió en un hombro al amigo que estaba en el asiento trasero del vehículo. A pesar del balazo, Sagardoy logró llegar manejando hasta el Hospital Eva Perón de San Martín, donde fue sometido a una cirugía.

La bala calibre .22 que ingresó por la axila y terminó alojada en la ingle le produjo un gran daño interno. Tras dos días de agonía falleció el lunes por la tarde. La causa fue caratulada como un "homicidio agravado por el uso de arma de fuego".

Por el relato que hicieron los testigos del hecho, la policía había descartado que se tratara de un homicidio en ocasión de robo. Fueron los propios allegados a la víctima los que le dieron a los investigadores el dato de que se habían confundido de persona.

"Nos enteráramos que entre los que cometieron el hecho había un conocido de Jony. Cuando los familiares y amigos empezamos a contar por redes sociales lo que había sucedido, este muchacho se comunicó con nosotros y nos contó llorando lo que había pasado, que se habían equivocado de persona", explicó Olivieri.

El arrepentido se presentó a declarar primero en la comisaría 9ª de San Martín y aportó los datos necesarios para identificar a las personas implicadas, entre ellas al tirador, Guillermo Nicolás Gómez (26).

En su indagatoria ante el fiscal Fabricio Iovine, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de San Martín, el acusado reconoció que participó de la persecución y que bajó armado a increpar a quien creían era un delincuente, pero negó haber efectuado el disparo.