El juez Florentino Malaponte dictó ayer prisión preventiva por 90 días al hijo del secretario general del Sindicato de Recolectores y Barrido, Marcelo "Pipi" Andrada, y a un miembro de ese gremio. La policía los había detenido a ambos el viernes a la tarde, en un procedimiento realizado en Juan B Justo y Campbell, cuando transitaban a bordo de un Honda Civic con una pistola en su poder. La detención resonó en el ámbito gremial donde Andrada es un conocido dirigente. Su hijo, de 21 años, y Sandro Maidana, de 37, tenían encima una pistola 9 milímetros cargada con 15 balas (foto). Este último había sido condenado en mayo a 2 años y medio de prisión condicional por participar del ataque a un hombre en julio de 2017, en Provincias Unidas y 27 de Febrero, hecho por el cual la víctima sufrió la amputación de una pierna.
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