Las autoridades de la Asociación Amigos del Arte, cuestionadas por un grupo de artistas por la decisión de demoler la casona ubicada en 3 de Febrero al 700 para construir tres torres de departamentos, tensaron aún más el conflicto al desestimar la invitación realizada por los ediles que integran la Comisión de Cultura del Concejo, preocupados por el destino del patrimonio artístico. "Están dispuestos a no dar ningún tipo de explicaciones, algo que no los ayuda porque acá estamos hablando del valor cultural", se quejó el concejal de Cambiemos, Carlos Cardozo, por el faltazo de los integrantes de la comisión directiva de la asociación. Por otra parte, el edil denunció que las 200 obras pictóricas, con firmas muy importantes, "están apiladas en un gimnasio y no están resguardadas como merece una colección de esa naturaleza". En ese marco, adelantó que en la sesión del jueves avanzarán con una declaración de preocupación por el legado cultural: "Vamos a pedir a la Municipalidad que intervenga para que se firme un convenio con la asociación para darle una guarda correcta a las obras".

El grupo de artistas plásticos, que el pasado viernes realizó un abrazo simbólico a la casona de la Asociación Amigos del Arte, comprada a través de un crédito aportado por el Fondo Nacional de las Artes, reclamándole transparencia a las autoridades, fueron ayer a la Comisión de Gobierno tras haber sido recibidos la semana pasada en la de Cultura. Allí también expresaron las preocupaciones por el patrimonio artístico que incluye obras, entre otros, de Juan Grela, Leónidas Gambartes y Eduardo Sívori.

La idea de los concejales de la comisión que preside Andrés Giménez fue la de invitar ayer a los miembros de la comisión directiva, que encabeza Rubén Pedalino, para escuchar de primera mano el estado de situación. "Los invitamos gentilmente a que nos expliquen el proyecto, no sólo que no fueron, maltrataron a la secretaria de la comisión. Si no tienen nada que ocultar, no les cuesta nada ir media hora a una reunión en el Concejo. Están dispuestos a no dar ningún tipo de explicaciones, quieren conseguir el permiso de demolición, tirar todo abajo, tienen una actitud absolutamente refractaria", cuestionó el concejal Cardozo.

El edil recordó que una persona se dirigió hacia una academia de danzas ubicada en calle Laprida, a la vuelta de la asociación: "Se encontró con Pedalino, quien lo dejó pasar y tomó las fotos donde se ven las obras apiladas. Más allá de la discusión de la obra civil, que vamos a conversar mañana (por hoy) con el secretario de Gobierno, Gustavo Leone, para conocer su visión sobre el tema, el jueves vamos a aprobar sobre tablas un proyecto expresando nuestra preocupación por el legado cultural".

Desde el Concejo pedirán a la Municipalidad para que intervenga como nexo, a través de la secretaría de Cultura, para la custodia de las obras hasta tanto la Asociación Amigos del Arte tenga su nueva casa. "También hay un piano canadiense, de la década del 30, que no sabemos dónde está. En algún momento también se dijo que en el domicilio particular de uno de los directivos habría obras, realmente está todo muy difuso, el capital sería muy grande", advirtió el concejal.

Sobre el piano, un ex presidente de la institución, Esteban Cereseto, contó en la reunión de la Comisión de Gobierno que el piano de cola que había en la entidad era un "Browser de 1936, uno de los 6 de ese tipo que había en el mundo", para luego agregar que durante su gestión había sido el afinador de pianos del Teatro Colón, quien hizo la tarea.

Por otra parte, Cardozo reveló que la provincia realizó un inventario del las obras de la asociación: "Les vamos a pedir si nos lo pueden facilitar, necesitamos algún tipo de herramienta para la guarda de las obras que, a simple vista y sin ser un experto en arte ni curador, están apiladas en un gimnasio".