La estabilidad del dólar oficial en torno de 58 pesos esconde varios problemas. La tasa de interés de las Leliq en 86 por ciento es uno de los principales desequilibrios, pero se sumaron otros. Desde que se aplicaron controles cambiarios hace menos de dos semanas comenzó a aumentar la brecha entre los distintos mecanismos para acceder a la divisa. Esto es la diferencia de cotización entre el tipo de cambio oficial y el resto de los "dólares" que maneja el mercado. El oficial cerró este jueves a 58,41 pesos, el paralelo pasó de 58 a 60 pesos. El dólar que se opera en la bolsa saltó de 63 a 66 pesos y la cotización para fugar divisas finalizó en casi 70 pesos.

El tipo de cambio oficial por abajo de 60 pesos se usa de referencia para las importaciones y las exportaciones. La brecha (o la diferencia de cotización) con el resto de los dólares financieros de la economía no debería impactar en el valor al que se ofrecen estos productos transables en el mercado interno.

El problema es que en la medida que crece la brecha cambiaria aparecen incentivos para los exportadores a no vender su mercadería y al mismo tiempo surgen incentivos para importadores a adelantar sus compras en el exterior. Estas filtraciones en el mercado cambiario se vuelven difíciles de contener y la brecha en aumento reaviva la expectativa de devaluación del oficial.

La tensión macro por la diferencia de cotización entre el dólar comercial y el financiero puede moderarse si el Banco Central cuenta con reservas líquidas suficientes para intervenir en el mercado cambiario y defender una determinada cotización. No es el caso actual de la autoridad monetaria. La entidad a cargo de Guido Sandleris registró en los últimos dos meses un fuerte desgaste de su patrimonio de moneda extranjera.

Reservas y depósitos

Las reservas pasaron de 68.761 millones de dólares a mitad de julio a 50.145 millones el 12 de septiembre. La caída acumulada es de 18.616 millones de dólares. Este jueves la baja fue de 88 millones y en lo que va de la semana el retroceso fue de 807 millones. La salida de depósitos en moneda extranjera de los bancos es uno de los principales motivos para explicar la pérdida de recursos del Banco Central. La última información disponible llega al lunes 9 de septiembre. Ese día se perdieron 266 millones de dólares. Desde las elecciones el retiro fue de 9483 millones y representa una salida de uno de cada cuatro dólares depositados.

En cuanto al riesgo país, este jueves hubo un nuevo avance. El indicador elaborado por el JP Morgan llegó a 2097 unidades (20 puntos por encima de la jornada anterior). El precio de los bonos en dólares anotó una fuerte caída. Se destacó la baja del Bonar 2020 del 9 por ciento. El Bonar 2024 y el Discount 2033 cayeron más del 4. La incertidumbre respecto de la capacidad del país para hacer el pago de la deuda se mantiene y el reperfilamiento por el momento no calma la ansiedad del mercado. El riesgo argentino continúa en los niveles más altos del mundo.