El juez José Luis Suárez imputó ayer a dos jóvenes que hace tres meses agredieron al rabino Shlomo Tawil en el centro. Y les endilgó el delito de lesiones leves dolosas calificadas al considerar que los motivó el odio religioso, tal como acusaron los fiscales César Cabrera y Rodrigo Santana, de la Unidad de Flagrancia.

Los acusados, L.B. y R.P. llegaron en libertad ayer hasta el Centro de Justicia Penal. Los fiscales se valieron del registro de videovigilancia que los escrachó el 9 de junio pasado, poco antes de las ocho de la noche, en Corrientes y Tres de Febrero, cuando acababan de perseguir, insultar y burlarse del religioso y su credo. Los agresores, además, le quitaron el kipá que identifica a los varones del judaísmo y, sobre todo, a los rabinos, y la emprendieron con empujones y golpes de puño que le causaron lesiones y la ruptura de sus anteojos a Tawil.

El peritaje forense comprobó también que la víctima fue atacada en el suelo a patadas. Eso le causó “traumatismo facial con laceración corneoconjuntival en ojo derecho y traumatismo en miembros inferiores”, precisó el informe médico.

Los agresores pidieron disculpas al rabino en la audiencia y se declararon arrepentidos. El juez los liberó a cambio de que comparezcan cada quince días en la Oficina de Gestión Judicial, que abonen una caución de 20 mil pesos cada uno, y les impuso la prohibición de acercarse al rabino, a su domicilio y a templos e instituciones hebreas.