Las organizaciones sociales y movimientos de la Central de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) afirmaron que existe un crecimiento permanente en los comedores y merenderos de la ciudad de Salta y que no están recibiendo la ayuda necesaria de parte de la Cooperadora Asistencial. Lo hicieron en el marco de la jornada nacional convocada ante la posibilidad de que la Cámara de Diputados nacional diera media sanción a la declaración de la emergencia alimentaria en Argentina, como ocurrió finalmente.

“Es un chiste lo de la Cooperadora Asistencial de nuestra ciudad”, señaló Romina Salazar, referente del movimiento popular La Dignidad. “Desde nuestro movimiento, tenemos 600 expedientes presentados. Solo a la mitad les están dando un bolsón mensual”, expresó Salazar. 

En el movimiento Octubres, Karen Junco, declaró que la Cooperadora Asistencial “no nos da nada” ante los reiterados pedidos. “Nunca nos recibió”, dijo en referencia al encargado de la Cooperadora Asistencial, Pablo Outes. 

El movimiento La Dignidad tiene 20 espacios en la ciudad en donde reparte el almuerzo y la merienda. “Hace poco nosotros teníamos los merenderos con 40 o 60 niños, hoy los tenemos con 100”, indicó la referente. “Ahí te das cuenta que es cada vez más grande la pobreza que se vive en Salta”, lamentó. “Nosotros no damos abasto por la poca ayuda que recibimos”, denunció Salazar. 

Junco destacó que en la Cooperadora le cuestionan que su organización siga sumando asistentes a los merenderos y comedores. “Nosotros no vamos y llamamos a la gente al merendero, ellos vienen porque necesitan”, enfatizó.Octubres se encarga de dos comedores y cinco merenderos, a los que asisten más de 300 personas. “Solo nos dan para dos merenderos y nosotros hacemos rifas y vendemos empanadas para sostener todo lo otro”, dijo Junco. 

Por su parte, la referente de La Dignidad, hizo referencia a los bolsones mensuales que reciben de la Cooperadora. “Nosotros tenemos 300 expedientes aprobados para familias a las que les corresponde un bolsón mensual. Eso no ocurre”, denunció. “Esos bolsones son entregados mes por medio o cada dos meses. Y lo que tienen no llega a las dos semanas”, explicó.

“El gobierno hace oídos sordos”, añadió la referente del movimiento La Ola, Camila López. “La pobreza ha aumentado. Es un número grande y ellos no quieren hacer ver eso”, indicó mientras se disponían a preparar una olla popular en el ingreso de la zona sudeste de la Capital (en la ruta provincial 26 y la avenida Tavella). 

La Ola tiene cuatro merenderos en la ciudad de Salta, en los barrios Nueva Esperanza, La Paz y Apolinario Saravia y en el asentamiento San Justo. 

En Salta Capital las organizaciones sociales presentaron un proyecto en el Concejo Deliberante, en noviembre de 2018, pidiendo que la ciudad se declare en emergencia alimentaria. “Nunca nos dieron una respuesta”, sostuvo Junco. “Se tendría que haber declarado la emergencia alimentaria hace bastante”, enfatizó.

Al mismo tiempo plantearon sus reservas con el Plan Alimentario salteño que anunció recientemente el gobierno provincial y se mantienen expectantes para ver cómo se aplicarán los aumentos de partidas que incluye este programa.

Según datos del INDEC, la provincia tiene 234.996 pobres y 36.993 indigentes. Los números señalan que la pobreza creció un 37,7 por ciento, ubicándola por encima del promedio nacional, de 32,2 por ciento.